De la belleza del perdón y la misericordia, habló Francisco refiriéndose al Padre Pío

REFLEXIONES EN FRONTERA, jesuita Guillermo Ortiz

El 6 de febrero de 2016, con la reliquia del cuerpo de san Pío en el santuario de san Pedro, Francisco expresó a los frailes capuchinos que están unidos y agradecidos porque San Pío “les ayudó a descubrir el tesoro de la vida, que es el amor de Dios, y a experimentar la belleza del perdón y  la misericordia del Señor”.

Dijo que el Padre Pío era un servidor de la misericordia a tiempo completo y hasta el agotamiento. Que “se convirtió a través del ministerio de la confesión, en una caricia viviente del Padre Dios,  que cura las heridas del pecado y conforta el corazón con la paz. San Pío no se cansó jamás de recibir  a las personas y de escucharlas, de gastar tiempo y fuerzas para difundir el perfume de perdón del Señor. Podía hacerlo porque siempre estaba unido a la fuente: se saciaba continuamente de Jesús Crucificado, y así se convirtió en un canal de misericordia”.

El Papa afirmó que el Padre Pío vivió el gran misterio del dolor ofrecido por amor. “De este modo, su pequeña gota ha llegado a ser un gran río de misericordia, que ha regado tantos corazones desiertos y ha creado oasis de vida en muchas partes del mundo”.