2014-12-07 09:02:00

“Sean hoy los juncos de Dios resistan a este viento feroz”, palabras del Papa a los cristianos iraquís


(RV).- “Sean hoy los juncos de Dios resistan a este viento feroz”, es la exhortación del Papa Francisco a los cristianos y al pueblo de Irak, a quienes animó en un video mensaje a seguir adelante en su fe.

Los saludos del Papa fueron transmitidos por el Cardenal de Lyon Philippe Barbarin, quien junto a un centenar de voluntarios se encuentran en la ciudad iraquí de  Erbil. La delegación fue recibida por el Patriarca de Babilonia de los Caldeos, Louis Raphael I Sako. La doble finalidad de esta visita es: llevar y transmitir la cercanía en la oración de la Iglesia europea a los cristianos en Irak y verificar la organización de la ayuda humanitaria en esta región. Esta iniciativa de la diócesis de Lyon para llevar solidaridad a los cristianos iraquís se desarrolla en el contexto de la “Fiesta de las luces”, festividad tradicional francesa en preparación de la solemnidad de la Inmaculada Concepción.

Mensaje completo del Papa Francisco

Queridos hermanos y hermanas,

Quisiera saludar a todos y a cada uno de ustedes, junto al Cardenal Philippe Barbarin, que nuevamente les transmite la preocupación y el amor de toda la Iglesia. También yo, quisiera estar ahí, pero ya que no puedo viajar, lo hago así… pero les estoy tan cerca en estos momentos de prueba. He leído, al regreso de mi viaje de Turquía: los cristianos son echados fuera de Oriente Medio, con sufrimiento. Les agradezco por el testimonio que ustedes dan; hay tanto sufrimiento en su testimonio. ¡Gracias! ¡Muchas gracias!

Parece que allá no quieren que existan los cristianos, pero ustedes dan testimonio de Cristo. Pienso a las plagas, al dolor de las madres con sus hijos, al de los ancianos y de los expulsados, a las heridas de quienes son víctimas de todo tipo violencia.

Como lo he recordado en Ankara, deja una particular preocupación el hecho que a causa de un grupo de extremistas y fundamentalistas, enteras comunidades, especialmente – pero no sólo – los cristianos y los yazidi, están sufriendo, y todavía sufren, violencias deshumanas a causa de su identidad étnica religiosa. Cristianos y yazidi han sido echados con la fuerza de sus casas, han debido abandonar cada cosa para salvar la propia vida y no negar la fe. La violencia ha golpeado también edificios sagrados, monumentos, símbolos religiosos y los patrimonios culturales, casi como querer cancelar toda huella, toda memoria del otro.

¡En calidad de líderes religiosos, tenemos la obligación de denunciar todas las violaciones de la dignidad y de los derechos humanos!

Hoy quisiera acercarme a ustedes que soportan estos sufrimientos, estar cerca… Y pienso en Santa Teresa del Niño Jesús, que decía que ella y la Iglesia se sentían como un junco: ¡cuando viene el viento, la tempestad, el junco se dobla, pero no se rompe! Ustedes sean en este momento este junco, ustedes se doblan por el dolor, pero tienen esta fuerza de llevar adelante su fe, que para nosotros es testimonio. ¡Ustedes son los juncos de Dios hoy! ¡Los juncos que se abajan con este viento feroz, pero luego resurgirán!

Quiero agradecer una vez más. Rezo al Espíritu Santo que hace nuevas todas las cosas, donar a cada uno de ustedes la fuerza y la resistencia. Es un don del Espíritu Santo. Y juntos pido con fuerza, como ya hice en Turquía, una mayor convergencia internacional dirigida a resolver los conflictos que ensangrientan sus tierras de origen, a contrastar las causas que obligan a las personas a dejar su patria y a promover las condiciones para que puedan permanecer o regresar. Yo les deseo que ustedes regresen, que ustedes puedan retornar.

Queridos hermanos y hermanas, están en mi corazón, en mis oraciones e en el corazón y en las oraciones de todas las comunidades cristianas a las que pediré de orar, de modo especial por ustedes, el 8 de diciembre, orar a la Virgen para que los proteja: Ella es madre, que los protege.

Hermanos y hermanas, su resistencia es martirio, llovizna que fecunda. Por favor, les pido que recen por mí, que el Señor los bendiga, que la Virgen los proteja.

Los bendiga Dios omnipotente, el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.








All the contents on this site are copyrighted ©.