"¡El pueblo carioca me ha robado el corazón!”, el Papa a los organizadores de la JMJ de Rio 2013

(RV).- (actualizado con video) El Papa Francisco calificó su viaje al Brasil del año pasado, por la Jornada Mundial de la Juventud, como “inolvidable”. Nueve meses después, El Santo Padre volvió a evocar esa emoción al recibir en Sala Clementina al Comité organizador de la JMJ de Río de Janeiro, guiado por el cardenal Orani Tempesta, arzobispo de esa ciudad. Recordamos que el viaje de Francisco al Brasil fue la primera visita internacional de su Pontificado
El pueblo carioca me ha recibido “con los brazos abiertos”, recordó el Obispo de Roma, recibiendo a su vez “con particular alegría” al grupo de 60 personas entre laicos, religiosos, sacerdotes y obispos que hicieron posible -subrayó - que “el amor de Dios tocase -literalmente- el corazón de millones de personas”. “Y hablando con el corazón, - agregó el Papa – tengo que hacerles una confesión:”
“Quando cheguei ao Brasil, no meu primeiro discurso oficial…”.
“Cuando llegué al Brasil dije que quería entrar en el inmenso corazón de los brasileños pidiendo permiso, para hacerlo delicadamente y transcurrir esa semana con el pueblo brasileño. Pero, al final de aquella semana, regresando a Roma, lleno de ‘nostalgia’, pensé que los ‘cariocas’ son ¡‘ladrones’! Si, ‘ladrones’, porque ¡me han robado el corazón!”.
“Sé que no fue fácil organizar un evento de esas dimensiones” y “que a veces alguien pensó que no se podría hacer”, observó Francisco. Pero “las horas de trabajo, los sacrificios e incluso los malentendidos momentáneos son pequeñeces ante lo grandioso de la acción de Dios sobre nuestros pobres recursos humanos. Es la dinámica de la multiplicación de los panes”, enfatizó el Papa.

“Não foi assim que aconteceu com a Jornada Mundial da Juventude...?”

“¿No ocurrió así con la JMJ?” preguntó Francisco, instando a los miembros del Comité a mirar ahora hacia el futuro, “asegurados por la certidumbre que Dios multiplica siempre nuestros esfuerzos”, por difundir el mensaje de la JMJ: “vayan sin miedo, para servir”. Debemos ser una “Iglesia en salida”, concluyó el Pontífice, invitando a seguir el ejemplo de José de Anchieta, apóstol del Brasil, recientemente proclamado Santo, de “mantener viva en el corazón de los brasileños la llama de amor por Cristo y su Iglesia”. (RC-RV)