Para el cristianismo la instigación a la violencia es la máxima corrupción de la religión
Actividades de la Santa Sede
(RV).- (Con audio) El pasado 16 de enero
se presentó el Documento de la Comisión Teológica Internacional titulado “Dios Trinidad,
unidad de los hombres. El monoteísmo cristiano contra la violencia”.
Al respecto,
cabe destacar que en el quinquenio 2009-2014 la Comisión Teológica Internacional realizó
realizado un estudio sobre algunos aspectos del razonamiento cristiano acerca de Dios,
confrontándose de manera particular con la tesis según la cual se daría una relación
necesaria entre el monoteísmo y la violencia.
Este trabajo se desarrolló dentro
de una comisión presidida por el Rev.do Philippe Vallin. Las discusiones generales
sobre este tema se desarrollaron en varios encuentros de la Subcomisión y durante
las sesiones plenarias de la misma Comisión, que tuvieron lugar en los años 2009-2013.
Este texto fue aprobado por la Comisión “en forma específica” el 6 de diciembre de
2013 y posteriormente fue sometido al estudio de su presidente, S.E. Mons. Gerhard
L. Müller, Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, quien autorizó su
publicación.
En este texto de reflexión teológica se proponen mostrar algunos
aspectos del discurso cristiano sobre Dios que, en el contexto actual, que requieren
una clarificación teológica específica. La ocasión para esta clarificación es la teoría,
que se argumenta de diversas maneras, según la cual se da una relación necesaria entre
el monoteísmo y las guerras de religión. La discusión en torno a esta conexión ha
hecho que salgan a la luz no pocos motivos de malentendido de la doctrina religiosa,
que oscurecen el auténtico pensamiento cristiano sobre el único Dios.
Este
propósito se resume en una doble pregunta:¿de qué manera la teología católica puede
confrontarse críticamente con la opinión cultural y política que establece una relación
intrínseca entre monoteísmo y violencia? Y ¿de qué manera la pureza religiosa de la
fe en el único Dios puede ser reconocida como principio y fuente del amor entre los
hombres?
Esta reflexión se presenta en clave de testimonio argumentado, y no
de contraposición apologética. Porque la fe cristiana reconoce en la instigación a
la violencia la máxima corrupción de la religión. Mientras el cristianismo tiene esta
convicción a partir de la revelación de la intimidad misma de Dios, que llega a nosotros
mediante Jesucristo. A la vez que la Iglesia de los creyentes es consciente del hecho
de que el testimonio de esta fe debe ser correspondida con una actitud de conversión
permanente: lo que implica también la franqueza valerosa de la necesaria autocrítica.
Producción
de María Fernanda Bernasconi. (hispano@vatiradio.va)
El espacio “Actividades
de la Santa Sede”, se transmite los martes en las emisiones informativas de las 17,30;
01,45 y 03,20 UTC.