(RV).- (Con audio) Ha sido publicado el Mensaje del IV Congreso Misionero Americano
CAM 4 y IX Congreso Misionero COMLA 9, realizado en Maracaibo. En el mensaje los
participantes agradecen a Dios por haber reunido los diversos países y culturas que
componen América “para compartir experiencias y diseñar caminos de evangelización
inculturada e intercultural” y por los “días de convivencia, reflexión, oración y
propuestas de acción para y desde las iglesias particulares de nuestra América”. “Haz
que nuestras iglesias vivan una comunión al servicio de la misión y sean misioneras,
proféticas y liberadoras, afirman los congresistas, mientras expresan el deseo de
que la Iglesia que peregrina en América sea “una Iglesia que se ponga en camino, una
Iglesia dialogal, que opte por los pobres, testimonial y en permanente conversión
de personas y estructuras”.
También agradecen al Obispo de Roma “el calido
mensaje” que les ha enviado así como la participación del Cardenal Fernando Filoni,
Delegado del Santo Padre. Ӄl, aseguran, hizo presente entre nosotros la persona
del Papa Francisco y su nuevo estilo de Iglesia, recordándonos que la Misión Ad Gentes
es tarea de toda la Iglesia”.
Discipulado, Conversión, Secularización, Pluriculturalidad
y Misión Ad Gentes son los ejes temáticos y orientaciones pastorales de este Congreso
Americano Misionero, que los congresistas se proponen realizar en la propias comunidades.
Escuchemos
a Mons. Vittorino Girardi, misionero comboniano y Obispo de Tilarán en Costa Rica,
quien nos da sus impresiones acerca de este evento internacional:
Texto
completo del Mensaje del IV Congreso Misionero Americano y IX Congreso Misionero
Bendito
sea Dios, Padre amoroso y misericordioso, que ha salido de sí mismo a comunicarse
a los seres humanos y quiere que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento
de la verdad(Cf. 1 Tm 2,4) y que ha creado al ser humano con un anhelo último de conocer
esta verdad y llegar a la plenitud de su vida(Cf. Ad Gentes 8).
Gracias, Padre
de todos los pueblos por reunir los diversos países y culturas que componen nuestra
América en este IV Congreso Americano Misionero realizado en Maracaibo del 26 al 30
de noviembre de 2013. El lema ha sido: “América Misionera comparte tu fe” y el tema
“Discípulos Misioneros de Jesucristo desde América en un mundo secularizado y pluricultural”.
Culturas indígenas, campesinas, afroamericanas, urbanas, suburbanas, mestizas y migrantes
se congregaron para compartir experiencias y diseñar caminos de evangelización inculturada
e intercultural.
Alabado sea Jesucristo, Hijo de Dios hecho hombre, enviado
del Padre, que anunció el Reino de Dios con palabras y gestos y que, una vez resucitado,
envió a sus discípulos a continuar su misión. Él nos sigue enviando a todos- ordenados
y laicos, consagrados y familias, niños, jóvenes y adultos- a anunciar la Buena Noticia
de su Reino de hermandad y justicia y a hacer discípulos de todos los pueblos.
Glorificado
sea el Espíritu Santo enviado por Jesús. Él, protagonista de la Evangelización,
nos impulsa a continuar con valentía y creatividad la misión de Jesús en diversos
tiempos, situaciones y culturas.
Damos gracias a Dios Padre, Hijo
y Espíritu Santo por estos días de convivencia, reflexión, oración y propuestas de
acción para y desde las iglesias particulares de nuestra América. Cinco Ponencias,
22 Foros, celebraciones litúrgicas y diversos testimonios misioneros constituyeron
un nuevo impulso para continuar avanzando en nuestra tarea evangelizadora hacia dentro
(Inter Gentes) y hacia afuera (Ad gentes). Los foros se organizaron alrededor de cinco
ejes temáticos: Discipulado, Conversión, Secularización, Pluriculturalidad y Misión
Ad Gentes.
Bendito seas por el Santo Padre Francisco, primer papa latinoamericano,
quien nos ha enviado un cálido mensaje en el que se alegra por la trascendencia
de un Congreso que contribuirá a dar un nuevo impulso a la Misión Continental promovida
por Aparecida. Bendecimos al Señor por la Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium
(La alegría del Evangelio) en la que el Papa nos invita a iniciar una nueva etapa
evangelizadora marcada por la alegría que nace y renace del encuentro con Jesús. Gracias
Señor por la presencia del Cardenal Fernando Filoni, Prefecto de la Congregación para
la Evangelización de los pueblos y Delegado extraordinario del Santo Padre. Él hizo
presente entre nosotros la persona del papa Francisco y su nuevo estilo de Iglesia
recordándonos que la Misión Ad Gentes es tarea de toda la Iglesia.
Enséñanos Señor a mirar este mundo cambiante, plural y complejo con esperanza
y amor, con profundidad y profetismo. Ayúdanos a encontrar en la Palabra de Dios,
centro de la vida y de la misión de la Iglesia, respuesta a un mundo individualista
que parece vivir sin sentido. Jesús es Palabra de Dios encarnada. La Palabra de Dios
es una Palabra informativa y performativa que comunica un proyecto de valores revelado
en Jesús y de manera eficaz y poderosa nos hace ver con los ojos de Jesús y nos capacita
para transformar el mundo.
Haz Señor que nos percatemos que la misión hace
la Iglesia, que ella es un desafío teológico-espiritual y que ella se origina en las
entrañas de la comunidad trinitaria que, por amor, sale de sí misma a relacionarse
con la humanidad. La fe en la encarnación implica entrar en las culturas. La fe en
la resurrección lleva a evangelizar desde adentro a las culturas. Pentecostés hace
posible el encuentro igualitario y enriquecedor de diversas culturas. Haz que nuestras
iglesias vivan una comunión al servicio de la misión y sean misioneras, proféticas
y liberadoras. Que la Iglesia que peregrina en América sea una Iglesia que se ponga
en camino, una Iglesia dialogal, que opte por los pobres, testimonial y en permanente
conversión de personas y estructuras. En esta Iglesia misionera la vida religiosa
consagrada se concibe como una misión mística, simbólica y profética. Ella es misionera
Ad Gentes por naturaleza (Ad Gentes 2). Espíritu de Jesús danos valentía y creatividad
para realizar en nuestras comunidades las orientaciones pastorales asumidas en este
Congreso Americano Misionero:
A nivel de discipulado misionero: nos
proponemos agradecer y expresar lo mejor que nos pudo acontecer en la vida, el haber
encontrado a Jesucristo haciéndonos discípulos misioneros y renovando el compromiso
y el gozo de hacerlo conocer.
A nivel de Conversión: Conversión eclesial
a todos los niveles, desde la escucha de la Palabra que nos lleve a una comunión eclesial
que promueva una pastoral profética que denuncie la injusticia;
A nivel
de Secularización: desarrollar un cambio de actitud y mentalidad en todas las
estructuras humanas; una nueva mirada de las relaciones: evangelización con rostro
humano, incluyendo diálogo y respeto con los gobernantes y sociedades para abogar
e incidir por el desarrollo humano, por el campo y la ciudad en todo el ámbito de
la vida política, económica, social, cultural y ecológica. Priorizando la formación
en todas las estructuras eclesiales y sociales para emprender ese espíritu del nuevo
misionar.
A nivel de Pluriculturalidad: Promover la interculturalidad
a través de un acercamiento respetuoso a la diversidad, que iluminada con el evangelio
nos lleve a promover acciones pastorales liberadoras, descolonizadoras, con enfoque
de derecho y pertinencia cultural, revitalizando mediante la liturgia inculturada
la formación de agentes pastorales y el compromiso apostólico con la realidad social,
política, económica y cultural el anuncio del evangelio en comunidades excluidas,
empobrecidas y marginadas. Para que nuestros pueblos indígenas, afros y culturalmente
emergentes tengan vida y vida en abundancia.
A nivel de Misión Ad Gentes:
las Conferencias Episcopales en el trascurso de 5 años asuman un lugar de Misión y
envíen religiosas, religiosos, sacerdotes y laicos. Para ello deben promover la formación
sobre la Misión universal para todos los corresponsables pastorales, a través de itinerarios
de formación. Esto también requerirá la creación de estructuras económicas que permitan
enviar y recibir misioneros.
Que la Virgen de Guadalupe, San Juan Diego, Santa
Teresita del Niño Jesús, San Francisco Javier iluminen la nueva etapa evangelizadora
a la que nos invita el Papa Francisco: AMÉRICA MISIONERA, COMPARTE TU FE.