El Papa encomienda toda vida humana, especialmente la más frágil, indefensa y amenazada,
a la protección materna de María
(RV).- (Con audio) Una vez concluida la Santa Misa el Obispo de Roma recordó, antes
de rezar a la antífona mariana del ángelus, al nuevo beato Odoardo Focherini, esposo
y padre de familia, beatificado ayer en la localidad italiana de Carpi, quien salvó
a numerosos judíos de la persecución nazi y murió en un campo de concentración.
El
Papa también saludó a los participantes en el encuentro de motociclismo de Harley-Davidson
así como al del “Motoclub” de la Policía del Estado, e invitó a encomendar toda vida
humana a la protección de la Madre de Dios.
Alocución del Papa Francisco
antes de rezar el ángelus dominical:
Queridos hermanos
y hermanas:
Al término de esta Eucaristía dedicada al Evangelio de la Vida,
me alegra recordar que ayer, en Carpi, fue proclamado Beato Odoardo Focherini, esposo
y padre de siete hijos, periodista. Capturado y encarcelado por odio contra su fe
católica, murió en el campo de concentración de Hersbruck en 1944, a la edad de 37
años. Salvó a numerosos judíos de la persecución nazi. ¡Junto a la Iglesia que está
en Carpi, damos gracias a Dios por este testigo del Evangelio de la Vida!
Agradezco
de corazón a todos ustedes que han venido de Roma y de tantas partes de Italia y del
mundo, en particular a las familias y a cuantos trabajan más directamente por la promoción
y la tutela de la vida.
Saludo cordialmente a los 150 miembros de la Asociación
“Grávida – Argentina”, reunidos en la ciudad de Pilar. ¡Muchas gracias por lo que
hacen! ¡Ánimo y vayan adelante!
En fin, saludo a los numerosos participantes
en el encuentro de motociclismo de Harley-Davidson y también al del Motoclub de la
Policía del Estado.
Nos dirigimos ahora a la Virgen, encomendado toda vida
humana, especialmente la más frágil, indefensa y amenazada, a su protección materna.