El auténtico número 12

REFLEXIONES EN FRONTERA
jesuita Guillermo Ortiz

(RV).- (Audio) Celebramos hoy otra victoria del amor de Dios, porque el puesto de Judas no quedó vacío. Lo sustituyó Matías; san Matías Apóstol.

Teniendo a Jesús delante, Judas no renunció a sus propios intereses. Individualista, falso, cortado de los otros, siguió con su propias ideas solo. Jesús le dio la oportunidad hasta el último. Cuando Jesús ya no tenía escape humano de la tortura, la condena a muerte y su asesinato; cuando ya estaban los soldados para arrestarlo, le dijo a Judas: “¿Me entregas con un beso?” Judas tuvo conciencia, pero en vez de volver y pedir perdón, como sí lo hizo Pedro, se ahorcó.

Después de la ascensión de Jesús a lo más alto del gozo de Dios, los apóstoles eligieron a Matías para completar el equipo de los 12, entre aquellos que estuvieron con los apóstoles todo el tiempo que acompañaron a Jesús. Para ocupar un lugar tan significativo, el criterio decisivo lo da Pedro: “testigo con nosotros de la resurrección”, como se lee hoy en los Hechos de los apóstoles capítulo 1 versículos del 15 al 26.

Matías si respondió al amor victorioso de Jesús. Fue fiel hasta morir por su fe en Jesús.
Hoy nuestras comunidades rezan: “Señor Dios, tú que, para completar el número de los doce apóstoles, elegiste a san Matías, concédenos, por la intercesión de este apóstol, a nosotros, que hemos recibido el don de tu amistad, poder ser contados un día entre tus elegidos”.