Roma: Reflexiones sobre Mensaje del Papa para la Jornada Mundial de la Paz
(RV).- Este 26 de enero la presidencia nacional de Acción católica italiana y el Instituto
de Derecho internacional de la Paz “G. Toniolo”, celebran un seminario de profundización
sobre los temas afrontados por Benedicto XVI en su Mensaje para la jornada mundial
de la paz 2013 bajo el tema “Bienaventurados los que trabajan por la paz” con la intención
de brindar una contribución a la enorme tarea de educar para la paz que se plantea
a quien anhela el bien de las generaciones presentes y futuras. El horizonte común
en el que se mueve este análisis se fundamenta en el reconocimiento de ser, en Dios,
una única familia humana que está llamada a actuar para obtener la paz. Entre los
participantes en este encuentro se coloca Mons. Giovanni Angelo Becciu, sustituto
para los Asuntos Generales de la Secretaría de Estado de la Santa Sede, y Michel Roy,
secretario general de Caritas Internationalis.
Entre las numerosas temáticas
a las que llama el mensaje del Sucesor de Pedro para la Jornada Mundial de la Paz
que celebramos el pasado 1 de enero, se ha dedicado particular atención a lo que Benedicto
XVI indica como imprescindible presupuesto para la paz, y que se refiere a la promoción
de la vida humana en todas sus dimensiones: personal, comunitaria y trascendente.
En particular haciendo leva en el derecho fundamental a la vida, la promoción de
la estructura natural del matrimonio, la tutela de la libertad religiosa, así como
en la garantía de la plena realización de los derechos y de los deberes sociales,
primeramente entre todo el del trabajo.
En la coyuntura actual se trata
de cuestiones que en el contexto de crisis financiera, económica, ética y política
resuenan como una advertencia y una invitación. Los promotores de este encuentro destacan
que en juego está la construcción de un mundo más justo y solidario, la realización
de un modelo nuevo de desarrollo, la obtención de un bien más grande. Los desafíos
que deriven en el plano educativo, pastoral y civil serán recogidos por Acción católica
que se distingue por su compromiso educativo para la formación de las conciencias
y la promoción de un desarrollo humano integral de jóvenes y adultos, en cada parte
del País.