Proyecto Conga: seguir dialogando para preservar la vida en una región convulsionada
(RV).- La minería forma parte crucial del futuro de Cajamarca. Y como tal, el Proyecto
Conga es una oportunidad de desarrollo económico y social para la región, especialmente
para las provincias de Celendín y Cajamarca. Y de hecho, el pasado 6 de agosto, la
Defensoría del Pueblo de Lima, Perú publicó un pronunciamiento a propósito de la labor
de los facilitadores –en las personas de Monseñor Miguel Cabrejos y el Padre Gastón
Garatea– en el caso del llamado proyecto Conga.
En efecto, ante la negativa
de algunas autoridades y dirigentes de Cajamarca de seguir aportando a la labor que
están desarrollando, el Ministerio de defensor hace de conocimiento público que “el
trabajo de los facilitadores se ha orientado a escuchar a todos los actores, comprender
la complejidad de este caso y tratar de sentar las bases mínimas de confianza que
permitan el restablecimiento de la relación entre el gobierno nacional y las autoridades
y dirigentes de Cajamarca.
Tras afirmar que ambos facilitadores –avalados
por el respeto y la credibilidad de la que gozan, y con la aceptación y reconocimiento
de todos los actores– han realizado “notables esfuerzos en favor de una salida pacífica
a este problema”, en el pronunciamiento se explica que la propuesta de diálogo, formulada
desde distintos sectores, tiene un sentido real y concreto, a saber: “ayudar a resolver
el conflicto”. Medida en la que “el diálogo tiene por objetivo preservar la vida y
la integridad de las personas, restablecer la tranquilidad en una región convulsionada
desde hace meses y confirmar que el entendimiento pacífico es un elemento básico
de la democracia”.
Por esta razón, la Defensoría del Pueblo invoca en esa
medida a todos los actores del conflicto “a respaldar y a colaborar con el trabajo
de facilitación de Monseñor Miguel Cabrejos y del Padre Gastón Garatea”; al Presidente
del Gobierno Regional de Cajamarca y a los dirigentes regionales “a continuar con
el diálogo iniciado y a evitar toda medida que pudiese obstaculizarlo o limitarlo”.
De la misma manera invita al Gobierno Nacional “a evaluar el estado de emergencia
prorrogado en Cajamarca, tomando en consideración la apreciación de los facilitadores”.
Porque la Defensoría del Pueblo cree que “este tipo de esfuerzos sustentados en la
buena fe, la transparencia y la colaboración efectiva deben contar con el aval de
todos”. De ahí que manifiesta la esperanza de que “el trabajo realizado no se detenga
y que, por el contrario, permita abrir el camino del reencuentro entre peruanos y
peruanas, y el mecanismo específico de resolución del presente caso”.