(RV).- A una semana de distancia del terrible ataque perpetrado contra una Iglesia
nigeriana a manos de extremistas islámicos de Boko Haram, este 10 de junio dos nuevos
ataques contra iglesias católicas han dejado un sangre y desconsuelo entre los fieles
de aquella latitud africana. Nuevamente Nigeria se sume en el horror de los ataques
contra cristianos. Repitiendo el mismo modelo de violencia un coche bomba fue explosionado
en Jos, estado de Plateau, devastando las iglesias cuando los fieles se encontraban
reunidos en oración para celebrar la Santa Misa dominical dejando además de 4 muertos,
40 heridos, muchos de ellos en graves condiciones. Con los del domingo pasado se cumplen
18 meses de atentados kamikaze, raid armados, Iglesias incendiadas y más de 300 muertos
incluyendo a las víctimas de los enfrentamientos entre musulmanes y cristianos. Actualmente
existe una instrumentalización política en las acciones del grupo armado terrorista
Boko Haram, y mientras se multiplican los llamamientos a la calma el grupo fundamentalista
sigue dando rienda suelta a su estrategia de aniquilación de los cristianos en el
Norte del País. El objetivo es que abandonen definitivamente la región. La comunidad
internacional se declara implicada y anuncia medidas de firme compromiso para tutelar
y promover la libertad de religión y el combate contra el terrorismo. (Patricia L.
Jáuregui Romero - Radio Vaticano)