(RV).-Los fallecidos por el terremoto que sacudió la región italiana de Emilia Romagna
(norte del país) son oficialmente 17, después de que los bomberos hallaran hoy el
cadáver del único desaparecido que quedaba entre los escombros de una fábrica en
la localidad de Medolla. De las 17 víctimas mortales, 11 murieron al desplomarse
el techo de sus lugares de trabajo, otras cinco al derrumbarse su casa y un sacerdote
al caerse el techo de su parroquia. Al momento el principal problema es dar asistencia
a las cerca 14.000 personas desde que los terremotos registrados estos días no han
podido volver a sus casas y duermen en tiendas de campaña o en vagones de trenes.
El martes inmediatamente enterado, el Papa envió un mensaje, firmado por el Cardenal
secretario de Estado, al Arzobispo de Modena-Nonantola. A continuación el texto:
“A Su Excelencia Rev.ma Mons. Antonio Lanfranchi
Arzobispo de Modena-Nonantola
El
Sumo Pontífice se ha enterado con trepidación de la noticia del ulterior evento sísmico
que ha golpeado el territorio de esta Archidiócesis, destruyendo gravemente iglesias
y provocando sufrimiento e incomodidades en tantas familias. Su Santidad desea hacer
llegar a todos su afectuosa palabra de consuelo y de aliento, asegurando un particular
y constante recuerdo en la oración especialmente por cuantos han perdido la vida y,
mientras auspicia que no venga a menos la rápida solidaridad y la ayuda necesaria
para enfrentar este momento difícil, de corazón imparte a Vuestra Excelencia, al presbiterio
y a la entera comunidad diocesana una especial bendición apostólica.
Agrego
la expresión de mi personal cercanía que acompaño con la férvida oración.
Cardenal
Tarcisio Bertone, secretario de Estado de Su Santidad”.