(RV).- Con el objetivo de hacer real y eficaz el diálogo entre el gobierno y las poblaciones
indígenas en un contencioso sobre la nueva ley que limita las extracciones minerales
y en defensa de los recursos hídricos en los territorios indígenas, el obispo de la
diócesis de David, Presidente de la Conferencia Episcopal de Panamá Mons. José Luis
Lacunza, que funge como mediador, se encontró esta semana con cada una de las partes
antes de iniciar la sesión de diálogo. El prelado los llamó a mostrar signos concretos
para alcanzar un pronto acuerdo para el bien del País. Los medios de información en
Panamá han destacado por su parte que la Iglesia ha pedido que se mantenga un diálogo
constructivo. Sin embargo, mientras la Iglesia local trabaja en aras del diálogo se
han dado algunas manifestaciones por parte de los indígenas en diversas partes del
País, una de éstas con el asedio y coros contra el gobierno en la sede de la sociedad
responsable del Proyecto Hidroeléctrico Barro Blanco, mientras otro grupo llegó hasta
las puertas del Palacio Legislativo. Ante esta realidad Mons. Lacunza ha solicitado
la investigación por presuntas presiones actuadas entre los contendientes. (Patricia
L. Jáuregui Romero - RV)