La religión contribuye al bien; el laicismo, excluye
(RV).- La Conferencia del Episcopado Mexicano alude a la polémica sobre el tema de
la libertad religiosa, es decir, sobre el modelo de relaciones entre la Iglesia católica,
otras religiones y el mismo Estado. En un comunicado del Secretario Ejecutivo de
Relaciones Públicas del CEM, el Padre Manuel Corral Martín svd, se destaca que “la
Iglesia no está contra el Estado laico, sino que por el contrario, considera que la
laicidad del Estado en un régimen democrático, es la mejor manera de hacer valer la
libertad religiosa y respetar los derechos de los individuos, entre ellos, la libertad
de religión”. Sin embargo la los obispos reiteran que “deben establecerse puentes
de diálogo entre los defensores de los diferentes modelos a fin de hablar de temas
de fondo y no sólo de palabras.
“El Estado no puede ignorar que el hecho religioso
existe en la sociedad. Pretender, que el Estado laico tenga que actuar como si ese
hecho religioso no existiera, equivale a situarse al margen de la realidad”, además
recuerdan que el problema fundamental del laicismo que excluye del ámbito público
la dimensión religiosa consiste en el hecho de que se trata de una concepción de la
vida social que piensa y quiere organizar una sociedad que no existe, que no es real.
Tras destacar que el principio de la mutua independencia y autonomía de la Iglesia
y la comunidad política no significa una laicidad o aconfesionalidad del Estado, además
hace énfasis en que es el Estado quien debe “promover un clima social sereno y una
legislación adecuada que permita a cada persona y a cada religión vivir libremente
su fe, expresarla en los ámbitos de la vida pública y disponer de los medios y espacios
suficientes para poder aportar a la convivencia social las riquezas espirituales,
morales y cívicas”. (PLJR – RV) FUENTE: Nota CEM