Que reconozcan sus errores y se retiren de la actividad de muerte
(RV).- En un Comunicado de la Arquidiócesis de León, ante la visita del Papa, los
Obispos de México expresan “su repudio a la violencia y apelan a la unidad nacional
para fortalecer el Estado de derecho y la defensa de la vida humana”. Por esta razón,
una vez más hacen “un llamado a la conciencia de los individuos para que caigan en
la cuenta de que su conducta es destructora de la convivencia pacífica e impide cualquier
posible desarrollo y progreso”.
Con las mismas palabras del Beato Juan Pablo
II los obipos afirman hoy a México: “En el nombre de Dios: ¡basta con la violencia!,
¡basta con los ataques!”. Porque como afirmó el Papa Wojtyla en la ciudad italiana
de Siracusa, en 1994: “Es tiempo de abrir el corazón a Dios que es justo y misericordioso
y les pido un sincero cambio de vida”. Una vez más, los Obispos mexicanos dicen a
su pueblo: “Dios está siempre dispuestos a perdonarlos; sólo les pide que reconozcan
sus errores; que se arrepientan de ellos y no lo ofendan más agraviando a sus hijos;
que reparen los daños y se retiren de esta actividad de muerte”.
En cuanto
a la visita de Benedicto XVI los prelados informan que están a la espera de recibir
cerca de 200 Obispos de México y del Continente, un promedio de 3.000 sacerdotes,
1.000 Ministros Extraordinarios de la Eucaristía, 100 mil jóvenes voluntarios, más
de 70 periodistas del vuelo papal y 300 mil fieles que participarán en la Celebración
de la Eucaristía del domingo 25 de marzo. “Todo esto –afirman– nos exige algunos parámetros
de seguridad: para los fieles contar con su boleto y para todos los demás contar con
su acreditación, cumpliendo con los requisitos establecidos y presentando fotografía
e identificación oficial”. Porque –como escriben– “sin boleto o sin acreditación,
no podremos participar en los puntos de encuentro con el Santo Padre, salvo en los
recorridos”. (María Fernanda Bernasconi – RV).