(RV).- Este 11 de febrero concluye el Convenio “Jesús nuestro contemporáneo” promovido
por el Comité para el Proyecto cultura de la Conferencia Episcopal Italiana organismo
de la CEI que preside el Cardenal Camillo Ruini, y que inició el pasado día 9 articulado
en una serie de discusiones, conversaciones, entrevistas con diversas personalidades
del mundo eclesial y de la cultura.
Los trabajos abiertos por el Presidente
de la Conferencia Episcopal Italiana, Cardenal Angelo Bagnasco fueron inaugurados
con la lectura del mensaje que Su Santidad Benedicto XVI envió a los participantes,
y en el que destaca su aprecio por “la elección de dedicar a la Persona de Jesús”
las jornadas del Convenio que podrán “tener resonancia en la comunidad eclesial y
social italiana”. Para el pontífice, “muchas señales… revelan como el nombre y el
mensaje de Jesús aún en tiempos tan confusos, encuentren también el interés en aquellos
que no logran adherir a su palabra de salvación”.
En su relación de apertura
el Cardenal Angelo Bagnasco, puso en evidencia las diferencias entre los Países extra
europeos y europeos sobre la cuestión de la fe en Jesucristo: “Mientras en África,
Asia, América Latina, la frescura del cristianismo se toca con la mano, y las jóvenes
Iglesias -como la de Corea del Sur-, crecen a ritmos vertiginosos, en Europa no se
registra el mismo impulso, el mismo ardor en el anuncio de Jesucristo Señor y Salvador,
por lo cual “la fe corre el riesgo de apagarse como una llama que no encuentra más
alimento”.
Por su parte durante su participación en este Convenio, el Cardenal
Joseph Zen Ze-Kiun, obispo emérito de Hong Kong, sintetizó su experiencia destacando:
“Jesús es mi contemporáneo a través de los santos y de las personas que sufren. Ante
diversos centenares de personas el Card. Zen narró algunos hechos de su vida personal
en Shanghái y en Hong Kong, y del período en el que era profesor en los seminarios
de China popular, poniendo de relieve la fe profunda de la Iglesia china, como también
las dificultades en las que se encuentra sumergida.
La “actualidad de Jesús”,
dijo, se ve también en la “actualidad de la cruz”. El purpurado recordó a un gran
campeón de la fe en China, Mons. Antonio Li Duan, el difunto obispo de Xian, fallecido
en 2005, protagonista y artífice de la unidad de la Iglesia en China y de la unidad
con el Papa. El Cardenal Zen puso en evidencia que dentro de las presiones y de las
persecuciones, en China hay muchas conversiones al cristianismo, y que también en
Hong Kong, pequeña comunidad de 350 mil fieles sobre una población de poco más de
7 millones de habitantes, cada año se realizan miles de bautismos de adultos
El
encuentro desarrollado a lo largo de estos días ha tenido la intención de subrayar
la actualidad de Jesús, y su carácter de persona viva, real, portadora de una luz
y de una esperanza capaces de orientar el camino de una humanidad que ha entrado en
un tiempo de grandes cambios y de elecciones de gran alcance”.
Entre los relatores
se encontraban también Mons. Rino Fisichella Presidente del Pontificio Consejo para
la promoción de la Nueva Evangelización y el Cardenal Gianfranco Ravasi, Presidente
del Pontificio Consejo para la Cultura de la Pontificia Comisión para los Bienes Culturales
y de la Pontificia Comisión de Arqueología. (Patricia L. Jáuregui Romero - RV)