En el Ángelus el Papa recuerda la celebración del sexagésimo aniversario de la adopción de la Convención internacional que tutela a cuantos son perseguidos y obligados a escapar de sus países

Domingo, 19 jun (RV).- El Papa Benedicto XVI, al concluir la concelebración Eucarística en el Estadio de Serravalle, recordó que la hora del mediodía nos invita a dirigirnos en oración a la Virgen María. También en esta tierra, dijo Benedicto XVI, nuestra Madre Santísima es venerada en diversos Santuarios, antiguos y modernos. El Papa confío a ella a la asamblea reunida y a la entera población Sanmarinense y Montefeltrina, particularmente a las personas que sufren en el cuerpo y en el espíritu…

El Santo Padre se mostró también feliz de recordar que este domingo en Dax, Francia, era proclamada Beata Sor Marguerite Rutan, Hija de la Caridad, quien en la segunda mitad del siglo dieciocho trabajó con gran empeño en el Hospital de esa ciudad y que durante las trágicas persecuciones que siguieron a la Revolución, fue condenada a muerte por su fe católica y la fidelidad a la Iglesia

Participo espiritualmente del gozo de las Hijas de la Caridad y de todos los fieles que en Dax, toman parte en la Beatificación de Sor Marguerite Rutan, testimonio luminoso del amor de Cristo por los pobres

Finalmente Benedicto XVI recordó que mañana se celebra la Jornada Mundial del Refugiado:

En tal circunstancia, este año se celebra el sexagésimo aniversario de la adopción de la Convención internacional que tutela a cuantos son perseguidos y obligados a escapar de sus países. Invito por tanto a las Autoridades civiles y a toda persona de buena voluntad a garantizar acogida y condiciones de vida dignas a los refugiados, en espera que puedan retornar a su patria libremente y en seguridad

Texto Completo

Queridos hermanos y hermanas, mientras estamos por concluir esta celebración, la hora del mediodía nos invita a dirigirnos en oración a la Virgen María. También en esta tierra, nuestra Madre Santísima es venerada en diversos Santuarios, antiguos y modernos. A ella confío a todos vosotros y a la entera población Sanmarinense y Montefeltrina, de manera particular a las personas que sufren en el cuerpo y en el espíritu. En este momento dirijo un pensamiento de especial reconocimiento a todos aquellos que han cooperado en la preparación y organización de esta mi visita. ¡Gracias de corazón!

Estoy feliz de recordar que hoy en Dax, en Francia, es proclamada Beata Sor Marguerite Rutan, Hija de la Caridad. En la segunda mitad del siglo dieciocho, ella trabajó con gran empeño en el Hospital de Dax, pero, durante las trágicas persecuciones que siguieron a la Revolución, fue condenada a muerte por su fe católica y la fidelidad a la Iglesia.

Participo espiritualmente del gozo de las Hijas de la Caridad y de todos los fieles que en Dax, toman parte en la Beatificación de Sor Marguerite Rutan, testimonio luminoso del amor de Cristo por los pobres.

En fin, deseo recordar que mañana se celebra la Jornada Mundial del Refugiado. En tal circunstancia, este año se celebra el sexagésimo aniversario de la adopción de la Convención internacional que tutela a cuantos son perseguidos y obligados a escapar de sus países. Invito por tanto a las Autoridades civiles y a toda persona de buena voluntad a garantizar acogida y condiciones de vida dignas a los refugiados, en espera que puedan retornar a su patria libremente y en seguridad.

Angelus Domini…

Traducción del italiano y francés: Raúl Cabrera - RV