Benedicto XVI califica como comprensible un cierto escepticismo del pueblo croata
ante su ingreso en la Unión Europea por temor a “una burocracia centralizada demasiado
potente”
Sábado, 4 jun (RV).- Benedicto XVI calificó como comprensible un cierto escepticismo
del pueblo croata ante su ingreso en la Unión Europea, porque aunque es “lógico, justo
y necesario”, que Croacia entre donde siempre, histórica y culturalmente ha estado,
también es lógico el temor a “una burocracia centralizada demasiado potente” que no
tiene suficientemente en cuenta la historia y la riqueza de los pueblos que la conforman”.
A
bordo del avión de Alitalia que le ha llevado esta mañana hasta Croacia, y respondiendo
a los periodistas que le acompañan, el Santo Padre ha dicho que es comprensible que
un cierto sector esté preocupado y vea con escepticismo, e incluso con miedo, su entrada
“en una Europa ya hecha y construida". El Papa precisó que incluso ésta puede ser
la misión del pueblo croata, la de renovar la unidad en la diversidad, “porque la
identidad europea es una identidad propia en la riqueza de las distintas culturas
que confluyen en la fe cristiana, en los grandes valores cristianos”. En este sentido
el Pontífice ha animado a los croatas a enfocar el proceso de ingreso en la Unión
Europea como un proceso recíproco de dar y recibir.
Benedicto XVI ha resaltado
también la figura del beato cardenal Stepinac, gran pastor y gran cristiano, y hombre
de humanismo ejemplar a quien le tocó vivir dos dictaduras contrastantes: primero
la del régimen de los ustachas, que parecía cumplir el sueño de la autonomía y la
independencia, pero que en realidad era una mentira instrumentalizada por Hitler para
lograr sus objetivos; y después la dictadura contraria del comunismo donde el cardenal
Stepinac también luchó por la fe, por la presencia de Dios en el mundo, por el verdadero
humanismo que depende de la presencia de Dios.