2011-03-04 16:27:29

XII Asamblea del Sínodo de los Obispos: presentación de los Lineamenta


Viernes, 4 mar (RV).- Esta mañana, en la oficina de prensa de la Santa Sede, ha tenido lugar la conferencia de presentación de los Lineamenta para la XIIIª Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos sobre el tema “La nueva evangelización para la transmisión de la fe cristiana”, que tendrá lugar del 7 al 28 de octubre del próximo año 2012. Han intervenido Mons. Nikola Eterović, secretario general del Sínodo de los Obispos y el subsecretario Mons. Fortunato Frezza.

Recordamos que los “Lineamenta” son un documento escrito cuyo texto sirve para la preparación de la convocatoria de una asamblea sinodal. Se trata de las líneas-guía redactadas por la Secretaría General del Sínodo. Su objetivo es invitar y alentar a los obispos para que participen y puedan entrar en el debate, a través de un inventario pastoral de sugerencias.

Fue el Santo Padre quien anunció personalmente la convocatoria de este importante evento eclesial en la solemne concelebración de la Eucaristía de clausura de la Asamblea Especial para Oriente Medio del Sínodo de los Obispos, dado que debería ser un momento de verificación del camino recorrido, para reanudar con nuevo impulso la urgente obra de la evangelización del mundo contemporáneo.

Cabe destacar que la decisión del Sumo Pontífice fue precedida por dos eventos importantes: en primer lugar, según la práctica adoptada, el secretario general del Sínodo había pedido, en nombre del Santo Padre, a los 13 Sínodos de las Iglesias Orientales Católicas sui iuris, a las 113 Conferencias Episcopales, a los 25 dicasterios de la Curia Romana y a la Unión de los Superiores Generales, que señalaran por escrito tres temas que habrían podido ser tomados en consideración para una reflexión sinodal por su relevante importancia pastoral, y que pudiera interesar a la Iglesia universal siendo aptos para una discusión sinodal.

Mons. Nikola Eterović ha explicado que en sus respuestas, la mayoría de los episcopados propusieron para el próximo Sínodo la cuestión de la transmisión de la fe, proceso que en tiempos recientes ha conocido no pocas dificultades debidas a los grandes cambios de orden social, cultural y religioso. Mientras el segundo evento que ha influido sobre la elección definitiva del argumento sinodal ha sido la decisión del Santo Padre de erigir el Consejo Pontificio para la Promoción de la Nueva Evangelización.

De este modo -ha explicado el Secretario General del Sínodo de los Obispos- ha resultado la feliz decisión del Papa Benedicto XVI de encuadrar la mencionada inquietud pastoral generalizada de la transmisión de la fe en la reflexión sobre la nueva evangelización que se impone, si bien con modos diversos, en toda la Iglesia.

Tras analizar el procedimiento sinodal; los Lineamenta están divididos en tres capítulos que reflejan el tema de la Asamblea sinodal. A saber: “Tiempo de nueva evangelización”; “Proclamar el Evangelio de Jesucristo”; e “Iniciar la experiencia cristiana”. El documento, se concluye con una breve conclusión que retoma algunas descripciones de la “nueva evangelización”, sin la pretensión de proponer una definición precisa y exhaustiva, sino para facilitar la reflexión sobre este tema.

Fue Juan Pablo II quien introdujo el concepto de Nueva Evangelización en1979. Pero no se trata de un Nuevo Evangelio, ni es una repetición del pasado. La nueva evangelización es la respuesta a las necesidades de los hombres y de los pueblos de hoy, en los nuevos escenarios culturales que cuentan nuestra identidad. Es también la búsqueda de nuevos caminos, modos y expresiones que transmitan la alegría de la Palabra, hasta transformar la vida y la sociedad.

Los destinatarios de la Nueva Evangelización son los que se han alejado de la Iglesia en los países de antigua identidad cristiana y cuantos, en los países evangelizados más recientemente, están bautizados pero no han acogido de manera profunda el sentido del Evangelio. En Occidente concretamente, la fe se vive como si Dios no existiera. Y el contexto cristiano es visto con sospecha, mientras se multiplican las críticas a la Iglesia.

Pero la Iglesia, que existe para evangelizar, no se resigna y no se encierra en sí misma frente a la indiferencia y los ataques, y apelando a su identidad misionera, asume nuevas energías para proclamar con fuerza y alegría el Evangelio de Jesucristo.

Fundamental en la nueva evangelización es el diálogo con quienes no creen, así como el que se establece con otras religiones. Son seis los escenarios en los que va proyectado este diálogo: el cultural, en el que la secularización se presenta como “positiva” y se habla de la posibilidad de vivir sin trascendencia; el carácter social del diálogo, que ve protagonistas a los migrantes y a la globalización; la cultura mediática de la comunicación; y los últimos tres escenarios analizados por los Lineamenta se refieren al diálogo económico, el científico y el político.

¿Qué es lo que pueden hacer los cristianos? Ser misioneros, llevar esperanza y ser autocríticos -dicen los Lineamenta. Dar testimonio del Evangelio desde dentro, estar unidos a la hora de transmitir la Palabra de Dios, aceptando el desafío de medirse también con el ateísmo más agresivo o la secularización extrema. Porque éste es el martirio de la edad contemporánea.







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