Padre Lombardi señala los momentos más destacados del Papa en el 2010
Martes, 04 ene (RV).- Como suele ser por estas fechas - al concluir un año y empezar
otro - se trazan balances y se mira a las tareas que se vislumbran en los próximos
meses. Cinco viajes internacionales, cuatro visitas pastorales en Italia, una Exhortación
apostólica, un consistorio, 45 audiencias generales, un libro entrevista. Son algunos
de los números que han caracterizado el año 2010 de Benedicto XVI, que el día 30 de
diciembre firmó la Carta Apostólica en forma de “Motu Proprio” para la prevención
y el contraste de las actividades ilegales en el ámbito financiero y monetario.
Documento
que el Papa empieza reiterando que “La Santa Sede siempre ha levantado su voz para
instar a todas las personas de buena voluntad, y sobre todo a los líderes de las naciones,
al compromiso de la edificación, también a través de una paz justa y duradera en todo
el mundo, de la ciudad universal de Dios hacia la que avanza la historia de la comunidad
de los pueblos y las naciones. [Benedicto XVI, Carta Encíclica “Caritas in veritate”
(29 de junio de 2009), 7: AAS 101 / 2009), 645]. »
«Por desgracia, - lamenta
Benedicto XVI en el mismo Motu Proprio - en nuestro tiempo la paz, en una sociedad
cada vez más global, se ve amenazada por diversas causas, entre las cuales las de
un uso impropio del mercado y de la economía y aquella, terrible y destructiva, de
la violencia perpetrada por el terrorismo, que causa muerte, sufrimientos, odio e
inestabilidad social».
El 2010, con sus doce meses intensos, en los que no
han faltado momentos difíciles, ha sido un año – ha reconocido el Papa en su discurso
a la Curia Romana - marcado por el escándalo de los abusos contra menores por parte
de miembros del clero. Precisamente con este doloroso drama, empieza la reflexión
del director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede y de nuestra emisora, padre
Federico Lombardi, en una entrevista de Alessandro Gisotti, señalando los momentos
destacados del 2010 de Benedicto XVI:
«El problema de este año no es del
todo nuevo. En países como Estados Unidos, se había planteado ya hace una decena de
años con gran intensidad. También en Irlanda, el problema lleva algunos años, y en
el curso de 2009, ya había sido afrontado por el Papa, junto con algunos obispos irlandeses.
El Papa había anunciado su carta a los católicos de Irlanda sobre este tema. Sin embargo,
es verdad que en el curso de este año el problema se ha planteado con fuerza también
en otros países europeos y ello ha suscitado grandes reacciones y desconcierto. El
Pontífice ha realizado numerosos actos e intervenciones, que han sido ejemplares,
sobre cómo y con qué espíritu afrontar este problema. Ha demostrado con la escucha
de las víctimas en varias ocasiones su actitud de disponibilidad a escuchar, comprender
y participar en el sufrimiento. Ha invitado en muchos casos a la Iglesia a una renovación
profunda.
Recordamos el discurso al finalizar el año sacerdotal, que
nos conmovió a todos profundamente. Además, ha alentado también concretamente a todos
aquellos que se comprometen en la prevención, sanando esas heridas. Indicando la dirección
justa para superar el drama de este escándalo, que ha herido profundamente a tantas
personas, pero que debe ser considerado como ocasión para una renovación, una capacidad
de escucha, una reflexión profunda sobre todos los temas. No sólo, pues, sobre el
tema de la santidad sacerdotal, sino también sobre los temas de la sexualidad y del
respeto de la persona en el mundo de hoy, donde tantas veces falta por completo el
respeto a la dimensión de la sexualidad y de la afectividad. Espero que de este gran
drama pueda llegar para la Iglesia un impulso de renovación y también de empeño sobre
fronteras más profundas para un servicio a la dignidad de la persona humana y a la
santidad de la vida»
El
Papa ha dedicado su mensaje para la Jornada Mundial de la paz a la libertad religiosa.
Un tema de dramática actualidad, ante el recrudecimiento de las persecuciones contra
los cristianos...
«A menudo, pensando en las persecuciones y dificultades
de los cristianos, miramos principalmente hacia los países de Oriente Medio, pero
lamentablemente es cierto que en tantas otras regiones del mundo hay problemas. Pensemos
en lo que sucedió en India, en Filipinas y en otros países de Asia. También nos causan
mucho dolor, en particular en estos últimos meses, los problemas contra la libertad
de religión y de conciencia de los cristianos en China. Sobre ello ha habido algunas
intervenciones importantes y también muy explícitas de las autoridades vaticanas.
Pero el documento para la Jornada Mundial de la Paz de 2011 invita también a ampliar
la mirada sobre Occidente, sobre las sociedades secularizadas. El tema de la ‘cristianofobia’
ha sido empleado, por primera vez, en el discurso a la Curia Romana y es algo que
se refiere también a nuestros países y a nuestras culturas. Se intenta marginar de
la vida pública, en particular, los signos cristianos y las expresiones de la vida
cristiana en todas las regiones del mundo, también en aquellas de los países secularizados,
intento que se presenta como contribución a la vida buena de la sociedad. Ha sido
uno de los mensajes más significativos – y muy escuchado - del Santo Padre en su
viaje al Reino Unido, en particular en su discurso en Westminster Hall»
Uno
de los momentos fuertes en la vida de la Iglesia de 2010 ha sido el Sínodo de los
Obispos para Oriente Medio. También en esta ocasión, el Papa nos ha recordado - como
hace constantemente - cuánto los cristianos son promotores de reconciliación y de
paz, y no sólo en Tierra Santa:
«Sí - aunque también hubo, incluso después
del Sínodo, actos de violencia y de dificultades contra los cristianos, recordemos
el atentado contra la iglesia de Bagdad - el Sínodo ha dado una impresión de vitalidad,
de empeño, de anhelo de testimoniar activamente de parte de los cristianos de los
diversos ritos, de las diversas comunidades en la región. Por lo tanto, ha sido también
un signo de esperanza, a pesar de las dificultades que perduran»
Benedicto
XVI ha realizado varios viajes este año: cuatro en Italia y cinco internacionales.
El que realizó al Reino Unidos, como ha afirmado él mismo, queda memorable, también
por la beatificación de John Henry Newman:
«La figura de Newman ha sido
importante en este viaje y este Pontífice es una figura con un significado crucial
para la relación entre fe, razón y espiritualidad. En el último discurso a la Curia
Romana, el Papa puso de relieve un aspecto ulterior, que no había profundizado durante
su viaje al Reino Unido. Es decir, el de la conciencia. Qué significa la conciencia,
para el cardenal Newman, como criterio de guía en el camino de la búsqueda de la verdad.
El Papa propone la personalidad de Newman, sobre todo para el mundo anglófono, pero
también para la Iglesia universal, como una figura luminosa, en un tiempo en el que
hay que encontrar aún - entre tantas dificultades, pero con constancia - el camino
en el contexto de un debate cultural, religioso y espiritual que requiere un gran
empeño»
Entre
las decisiones de largo alcance tomadas por el Papa, en 2010, está la institución
de un dicasterio para la Nueva Evangelización. Pensamos en la fórmula del ‘Atrio de
los gentiles’, propuesta por Benedicto XVI para los hombres de nuestro tiempo:
«La
constitución de un nuevo Dicasterio ha sido quizá una sorpresa, porque no se pensaba
que se necesitaban nuevas instituciones en la Curia Romana. Pero es un mensaje muy
claro. El mensaje de la prioridad del anuncio - del anuncio del Evangelio - en la
misión de la Iglesia, siempre a través de los tiempos, también en situaciones difíciles.
El dicasterio para la Nueva Evangelización es un mensaje específico, pero debe trabajar
en el contexto de la misión más amplia de la Iglesia, en el tema precisamente del
anuncio explícito del Evangelio en el mundo de hoy»
El
Padre Lombardi ha definido el libro entrevista ‘Luz del mundo’ como ‘acto de verdadera
valentía comunicativa’. Y nos explica cuál es para él el desafío que Benedicto XVI
dirige a los comunicadores, fenómeno éste que caracteriza, casi define, la era en
que vivimos:
«Seguimos descubriendo las características específicas del
Papa Benedicto XVI en lo que respecta a la comunicación. Alguien pensaba que era un
Papa poco comunicativo, con respecto a su gran predecesor. En realidad, está encontrando
fórmulas que son suyas, características, pero nuevas – también de parte de un Papa
– para comunicar el mensaje. Pensemos en el mismo libro ‘Jesús de Nazaret’ del que
estamos esperando el segundo tomo, pero también un tercero. Un libro de carácter teológico
y espiritual, escrito personalmente por un Papa teólogo es también una gran novedad
de este Pontificado, así como el libro entrevista. Ello muestra ciertamente la reflexión
y la búsqueda de parte del Papa para encontrar los caminos adecuados y cónsonos, también,
a su personalidad comunicativa. Pero quisiera añadir otras formas clásicas de su comunicación,
que son sus homilías, sus catequesis y sus grandes discursos. Las homilías, en particular,
cualifican el servicio de este Papa como un gran aporte a la síntesis entre teología
y espiritualidad para la Iglesia de hoy: es un maestro de ‘homilética’ para la Iglesia
entera»