Preocupación de los obispos suizos por la hostilidad hacia los símbolos religiosos
en espacios públicos
Martes, 7 dic (RV).- Los obispos suizos muestran su preocupación por la “fuerte hostilidad”
contra la presencia de los signos religiosos en lugares públicos, y afirman que la
prohibición del crucifijo “nunca será una expresión de tolerancia, sino de la intolerancia,
pues impide la expresión pública de la fe cristiana. Así lo afirman en el comunicado
final oficial de su 290ª Asamblea ordinaria, celebrada en Viège la semana pasada,
y en el que muestran también su solidaridad con los cristianos perseguidos en Oriente
Medio.
Los prelados denuncian la existencia de “una fuerte hostilidad recientemente
manifestada contra los signos religiosos en el espacio público”, y de “una tendencia
que pretende confinar la creencia de la gente a la esfera privada”. La Conferencia
Episcopal subraya que la libertad de creencias y de conciencia “es un bien precioso
que deben respetar toda comunidad religiosa y todo Estado”. Esta libertad “permite
a los hombres vivir, individualmente o en la comunidad que elijan, conforme a su creencia
y conciencia – tanto en privado como en público”.
Además, subrayan los obispos,
“la mayoría de la población es favorable a la presencia pública de los signos cristianos,
como la cruz y el crucifijo”. “Esta mayoría reconoce que no se trata de defender antiguos
privilegios, sino que a través de la desaparición de estos signos, se corre el riesgo
de comprometer los fundamentos cristianos de nuestra sociedad”, añade el comunicado.