En su catequesis el Papa destaca la peculiar inteligencia y sensibilidad femenina
de Santa Ildegarda de Bingen
Miércoles, 8 sep (RV).- Benedicto XVI, en su catequesis de esta mañana destacó la
figura de la religiosa benedictina alemana Santa Ildegarda de Bingen de gran santidad
y sabiduría espiritual.
Esta fue su catequesis en nuestro idioma: Queridos hermanos y
hermanas: Quisiera continuar en el día de hoy hablando de Santa Ildegarda
de Bingen, religiosa benedictina de origen alemán que, en el siglo doce, se distinguió
por su santidad y sabiduría espiritual. Esta santa gozó durante toda su
vida de continuas visiones místicas, que una vez reconocidas por la autoridad de la
Iglesia, se pusieron por escrito en diversos libros. Éstos resuman un amplio conocimiento
de las Sagradas Escrituras y de los Padres de la Iglesia. Las obras de Santa Ildegarda
se centran en la exposición de los principales misterios de la historia de la salvación,
presentados con una notable profundidad teológica, y con su peculiar inteligencia
y sensibilidad femenina. Además de su producción teológica y moral, Ildegarda abordó
temas relativos a la medicina, las ciencias naturales o la música. Gozó
de gran popularidad en su época, por lo que numerosos obispos y abades mantenían correspondencia
con ella, consultándole muchos de los problemas que se les planteaban. En los últimos
años de su vida, se dedicó también a hablar de Dios a la gente, subrayando especialmente
la necesidad de una continua conversión en la vida monástica y sacerdotal.
Como
es costumbre, el Pontífice saludó en diversas lenguas a los numerosos grupos de peregrinos
procedentes de los cinco continentes. Y concluyó con un pensamiento especial para
los jóvenes, enfermos y recién casados presentes en el Aula Pablo VI.
A todos
ellos Benedicto XVI les recordó que hoy celebramos la memoria litúrgica de la Natividad
de la Bienaventurada Virgen María. Y destacó que al respecto el Concilio Vaticano
II dice que María nos precede en el camino de la fe porque "ha creído en el cumplimiento
de las palabras del Señor" (Lc 1, 45). Por esta razón afirmó que pide a la Santísima
Virgen para los jóvenes, el don de una fe cada vez más madura; para los enfermos,
una fe cada vez más fuerte; y para los recién casados, una fe cada vez más profunda.
Al
saludar en nuestro idioma a los fieles y peregrinos procedentes de España y América
Latina, el Papa les dijo:
Saludo a los peregrinos
de lengua española, en particular a los fieles de la Diócesis de Tula, en México,
que están celebrando el cincuenta aniversario de la creación de esa diócesis; a los
médicos y administrativos de la Arquidiócesis de Salta, en Argentina; así como a los
demás fieles provenientes de España, México, Panamá, El Salvador, Honduras y otros
países latinoamericanos. Invoquemos al Espíritu Santo, para que suscite siempre en
la Iglesia mujeres santas que contribuyan al crecimiento espiritual de nuestras comunidades.
Muchas gracias.