Mons. Esteban Escudero: “aliviar la difícil situación de los pobres y los parados”

Lunes, 30 ago (RV).- En España, la catedral de Palencia recibió este domingo a su nuevo obispo, Mons. Esteban Escudero, que hace el número cien en el espiscopologio de esta sede castellana, quien se presentó ante sus nuevos diocesanos señalando que en su ministerio episcopal dará prioridad a la dimensión de “la comunión” como eje vertebrador y se comprometió a “fomentar los espacios de comunión, de diálogo y de participación entre todos los miembros del pueblo de Dios”.

Junto con su gratitud y adhesión a Benedicto XVI, Mons. Esteban Escudero expresó también su deseo de convertirse “en un palentino más”, con la promesa de movilizar los recursos humanos y económicos de la diócesis para aliviar la difícil situación de los pobres y los parados.

El nuevo obispo de la Diócesis de Palencia inauguró su ministerio episcopal en una ceremonia multitudinaria, acompañado del Nuncio de Su Santidad en España, Mons. Renzo Fratini; del Administrador Apostólico y actual obispo de San Sebastián, Mons. José Ignacio Munilla, y del vicario general de la diócesis, Antonio Gómez Cantero, ha sido recibido por las autoridades civiles presentes. La Eucaristía se abrió con la lectura de las Cartas Apostólicas con las palabras de Benedicto XVI y el nombramiento del nuevo obispo de Palencia, del que el Santo Padre ha destacado “su capacidad y talento y su experiencia en el ministerio apostólico” y ha expresado su confianza en el nuevo pastor de la diócesis palentina.

Tras la lectura, el Nuncio del Papa, que presidió toda la celebración, le entregó el báculo y le invitó a tomar la Cátedra y a presidir la Eucaristía, entre las ovaciones y los aplausos de todos los asistentes. El hasta ahora Administrador Apostólico de la diócesis y anterior obispo palentino, Mons.José Ignacio Munilla, se dirigió a Mons. Escudero como “el Pastor que el Señor quería enviarnos” y ha definido al pueblo palentino como “cristianos recios, de hondas raíces y gente de buena masa, hambrientos y sedientos de Dios y necesitados del pastoreo de la Iglesia”.

Durante su homilía, tras expresar su agradecimiento a “todas las personas que han tenido que ver con su ministerio episcopal”, empezando por el Papa Benedicto XVI, y el Nuncio Apostólico en España, monseñor Escudero se dirigió asimismo a todas las autoridades y les prometió su “leal colaboración a favor del bien común de todos los palentinos”. También a lo largo de su homilía se dirigió a los sacerdotes, a la vida religiosa, a los fieles laicos, dedicando asimismo un énfasis especial a los jóvenes y, sobre todo, “a los enfermos, a los marginados a los pobres, a los que están sin trabajo, a los que no tienen lo necesario para vivir a todos los que de una forma u otra viven en el mundo del dolor”.