Obispos mexicanos reivindican su derecho al ejercicio de la libertad de expresión
Miércoles, 18 ago (RV).- La Conferencia del Episcopado Mexicano expresa su solidaridad
a los cardenales Norberto Rivera Carrera, Arzobispo de México y Juan Sandoval Íñiguez,
Arzobispo de Guadalajara quienes han sido criticados por sus firmes posiciones contra
los matrimonios homosexuales y la posibilidad de adopción de menores por parte de
éstos. En particular, los obispos mexicanos se solidarizaron con el cardenal Sandoval
Íñiguez frente a la polémica entablada con el alcalde capitalino, Marcelo Ebrard,
quien amenazó con demandarle si no ofrece una disculpa pública por haberle acusado
de corromper a magistrados de la Suprema Corte para validar los matrimonios homosexuales.
En el comunicado los obispos sostienen que “sensibles a la opinión mayoritaria”,
manifiestan en su “ejercicio de la libertad de expresión” garantizado por el régimen
democrático del país, su “total desacuerdo con el fallo emitido por la Suprema Corte
de Justicia, sin que esto signifique falta de respeto a las Instituciones del Estado
Mexicano”. “Creemos- afirman los prelados- que equiparar con el nombre de matrimonio
a estas uniones es una falta de respeto, tanto a la esencia misma del matrimonio entre
una mujer y un hombre”, como a las costumbres y la propia cultura de la nación.
La
Iglesia explican más adelante “vela por los derechos de los que no se pueden defender,
y en este caso, los más débiles como son los infantes. “Lamentamos- concluyen- que
al manifestar estos conceptos en la opinión pública, existan quienes recriminen y
amenacen alertando la intolerancia, cuando la tolerancia es la posibilidad de que
todos expresemos nuestra opinión y posiciones. Por ello, expresamos nuestra solidaridad
y nuestro sentir a los Señores Cardenales Norberto Rivera Carrera y Juan Sandoval
Íñiguez sobre este delicado tema .
La iglesia católica de México manifestó
su rechazo a la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de aprobar,
este lunes, la posibilidad de que personas casadas del mismo sexo adopten a menores
de edad en el Distrito Federal, después de que el pasado 5 de agosto avalara los matrimonios
homosexuales. En las últimas semanas, varias diócesis y arquidiócesis, así como numerosos
obispos e instituciones católicas han expresado su oposición a la aprobación de los
matrimonios homosexuales en el país, decisión a la que se le añade, la posibilidad
de adoptar a menores. Sobre esta medida, Alina Tufani Díaz conversó con Monseñor
Víctor René Rodríguez Gómez, Secretario de la Conferencia Episcopal de México.
Monseñor Rodríguez
aseguró que la iglesia seguirá su camino en defensa de la familia y el derecho de
los niños.
Sobre esta ley
que se limita fundamentalmente al Distrito federa, el secretario general del episcopado
mexicano confía en que no se extienda a otros estados de la nación.
En un comunicado,
la Arquidiócesis Primada de México afirma que “incontables familias mexicanas que
fueron bautizadas en la fe de Cristo, lamentan profundamente la precipitada, irresponsable
e injusta decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que desoyendo estudios
científicos internacionales en contra de la adopción de menores por parte de parejas
del mismo sexo, se han convertido en cómplices de las tragedias psicoafectivas y morales
que puedan ocurrir en un futuro, a niños inocentes que sean víctimas de este tipo
de adopción”.
“La Iglesia –se lee textualmente en la nota- pastores y ciudadanos,
considerada por algunos funcionarios públicos como una institución de Segunda clase
en donde sus ministros de culto son perseguidos por sus creencias religiosas y sus
opiniones, hace un llamado a los fieles a mirar con mayor responsabilidad las ofertas
de los partidos políticos para que en el futuro, ejerzan su derecho al sufragio en
concordancia con sus valores religiosos”.
Por último, la nota considera que
“algunos integrantes de la Suprema Corte de Justicia de la Nación han caído en excesos,
actuado en contra de la Ley Natural y aún en contra de la propia infancia; sobre sus
lamentables decisiones ahora legales, todos los responsables tendrán que responder
ante el Tribunal Supremo de Dios, ante sus familias y ante la propia historia”.
También
el Arzobispado de Guadalajara criticó a la Suprema Corte de Justicia de la Nación,
en comunicado maestra su “completo desacuerdo por esta decisión que en nada beneficia
a la mayoría de las personas en México, y que se orienta directamente a dañar, profunda
e irreversiblemente, al matrimonio –constituido por varón y mujer – y a la familia
–como prole de la unión de dos personas de diferente sexo".
El texto señala
que en su fallo la SCJN no tomó en consideración las investigaciones entregadas por
el Instituto Mexicano de Orientación Sexual, que advierten de los riesgos que este
tipo de adopción acarrea para los niños. Más adelante se advierte que "no se deben
considerar sólo los posibles derechos de las personas del mismo sexo que quieran adoptar,
sino también los derechos fundamentales del niño, y en particular del infante que
puede ser adoptado.