Los visitadores apostólicos nombrados por Benedicto XVI comienzan en otoño la investigación
de 4 archidiócesis irlandesas para afrontar los trágicos casos de abusos de menores
Lunes, 31 may (RV).- «La Santa Sede, por medio de la Oficina de Prensa, ha comunicado
hoy las decisiones del Santo Padre en lo que concierne a la visita apostólica, que
Benedicto XVI había anunciado en su Carta a la Iglesia católica en Irlanda, del pasado
mes de marzo (19.03.2010)». Así empieza la nota del Padre Federico Lombardi, presentando
el Comunicado correspondiente, que lleva también la fecha de hoy.
«La visita
apostólica dará comienzo el próximo otoño y abarcará, ante todo, las cuatro archidiócesis
irlandesas de Armagh, Dubín, Cashel y Emly y Tuam». «Además, en lo que respecta a
la formación del clero – se dirigirá a los seminarios y al Pontificio Colegio Irlandés
de Roma. Finalmente, serán visitados también los Institutos religiosos masculinos
y femeninos», añade el director de la Oficina de prensa de la Santa Sede, señalando
luego que «los visitadores nombrados por el Papa son figuras de elevado perfil y de
gran experiencia específica para los mandatos recibidos».
«Para las cuatro
archidiócesis mencionadas, se trata de prelados expertos en el gobierno de grandes
archidiócesis: los cardenales Murphy O’Connor y O’Malley (respectivamente arzobispo
emérito de Westminster y arzobispo de Boston) y los dos arzobispos canadienses Collins
y Prendergast (respectivamente de Toronto y de Ottawa). Para los seminarios, se trata
del arzobispo de Nueva York, Timothy Dolan, que fuera rector del Pontificio Colegio
Norteamericano».
«Para los religiosos y las religiosas, se trata también de
personas con amplia competencia en la formación y en el gobierno religiosos: el redentorista
Joseph Tobin (que fuera Superior general), el jesuita Gero McLaughlin (experto de
espiritualidad, que vive en Edimburgo), sor Sharon Holland (de las Hermanas del Sagrado
Corazón de María, estadounidense, canonista, durante largos años jefa de oficina en
la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada) y sor Mairin McDonagh (de
las Religiosas de Jesús y María, irlandesa, canonista, antigua Provincial)».
«El
Comunicado precisa las finalidades de la visita, definida como ‘ayuda que la Santa
Sede se propone ofrecer a los obispos, al clero, a los religiosos y a los fieles laicos,
para afrontar adecuadamente la situación determinada por los trágicos casos de los
abusos cometidos por sacerdotes y religiosos contra menores y para contribuir a la
renovación espiritual y moral anhelada y ya puesta en marcha con decisión por la Iglesia
en Irlanda», explica asimismo la nota del P. Federico Lombardi y reitera que la palabra
‘ayuda’, en inglés ‘assistance’ señala muy bien la naturaleza ‘subsidiaria’ de la
intervención de la Santa Sede, que no sustituye a las autoridades que están desarrollando
su cargo, sino que añade una presencia que - viniendo del exterior - puede estar en
mejor condición para recopilar con objetividad informaciones y expresar evaluaciones
útiles».
Asimismo, la nota del director de la oficina de Prensa de la Santa
Sede señala que «el mencionado Comunicado – sintetizando las cartas de los nombramientos
– indica las tareas de los visitadores, no sólo en el examen de las cuestiones relativas
al trato de los casos de abuso y a la asistencia debida a las víctimas, sino también
en el estudio de lo adecuado y de las posibles mejoras de los procedimientos de prevención,
a la luz de los documentos y de las directivas hoy en vigor, tanto para la Iglesia
universal (el Motu Proprio ‘Sacramentorum Sanctitatis Tutela’ de 2001), como específicamente
para la Iglesia en Irlanda (el documento ‘Safeguarding Children)».
«Naturalmente,
la visita a los seminarios y a los institutos religiosos se enmarca también en la
perspectiva más amplia de favorecer la renovación de la formación sacerdotal y de
la vida religiosa». La coordinación de las visitas estará a cargo de los tres dicasterios
de la Curia competentes. Es decir, las Congregaciones para los Obispos, para la Educación
Católica y para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica.
Ésta última se encargará también de una primera fase preparatoria de la Vista a los
institutos religiosos, enviando un cuestionario especial a los Superiores y a las
Superioras de los diversos institutos».
«El éxito de la visita presupone naturalmente
la colaboración abierta y cordial – en la verdad y en la caridad – de parte de todos
con los visitadores», añade la presentación del padre Lombardi, y señala que «no se
especifica la duración de las visitas, que requerirán ciertamente bastante tiempo,
también porque los visitadores son, en su mayoría, personas que conservan sus actuales
cargos de gran responsabilidad».
«Los visitadores deberán referir a quien les
ha dado el encargo, es decir a la Santa Sede, en otras palabras al Papa, asistido
por las Congregaciones competentes. Sobre la base de las relaciones, la Santa Sede
brindará a las instituciones visitadas indicaciones para superar las dificultades
o tomará las decisiones necesarias. En lo que se refiere a las diócesis, el comunicado
prevé expresamente que – después de las cuatro archidiócesis – sean visitadas sucesivamente
también algunas diócesis». La nota del director de la Oficina de prensa de la Santa
Sede termina señalando que «el Comunicado concluye con el anhelo de que la `visita,
acompañada y sostenida por la oración de toda la comunidad de la Iglesia en Irlanda,
sean bendecida por el Señor y contribuya al renovado fervor de la vida cristiana y
a la profundización de la fe y de la esperanza de todos sus miembros».