Intervención de la Hna. Pauline ODIA BUKASA, Superiora General de las Hermanas “Ba-Maria”,
Buta Uele (REPÚBLICA DEMOCRÁTICA DEL CONGO), Oyente
Rev.da Hna. Pauline ODIA BUKASA, F.M.S., Superiora General de las Hermanas “Ba-Maria”,
Buta Uele (REPÚBLICA DEMOCRÁTICA DEL CONGO)
Se margina a la mujer africana
a todos los niveles. Se la excluye casi por completo del proceso global de desarrollo
del continente. Es víctima de los usos y costumbres ancestrales, y es ella la que
actualmente lleva el peso de todos los conflictos armados que desgarran a África y,
en particular, a la República Democrática del Congo. En este momento, en el que la
Iglesia en África trabaja por la reconciliación de sus hijos e hijas, la mujer no
puede ser ignorada. Ella tiene un gran protagonismo. En nuestros días, el dinamismo
y la determinación de las mujeres para garantizar la supervivencia de sus hogares,
para el cuidado y la educación de sus hijos es un recurso que hay que capitalizar
por su plena implicación en el proceso de reconciliación en vistas de la paz verdadera.
Reconociendo
los esfuerzos que ya realizáis en favor de la dignidad de la mujer, nosotras, vuestras
madres y mujeres consagradas, os pedimos a vosotros, nuestros padres, los obispos
en esta Iglesia-Familia que se promueva la dignidad de la mujer asegurándole los espacios
necesarios para el despliegue de sus talentos en las estructuras eclesiales y sociales;
que se apoye a las asociaciones o a las ONGD femeninas, que ya están luchando por
la promoción de la mujer mediante la alfabetización y la educación; que se vuelvan
a crear escuelas de la Iglesia católica para asegurar a la juventud una educación
en los valores cristianos, africanos y humanos que puedan consolidar la estructura
familiar; que se denuncien todas las violaciones contra las mujeres, los niños y todo
la población, y que se les recuerde en voz alta a los autores de esta tragedia, tanto
a nivel nacional como internacional, la grave responsabilidad que tienen ante Dios
y ante la historia. Y que se haga justicia.