Intervención de Dom Cyprian Kizito LWANGA, Arcebispo de Kampala (UGANDA)
S. E. R. Dom Cyprian Kizito LWANGA, Arcebispo de Kampala (UGANDA)
Para
dar la visión de Caritas África, que es la de tener la vida y tenerla en abundancia
(Jn 10,10), consideramos que nuestra misión es la de dar testimonio del amor de Dios
(Hc 1,8) trabajando en el desarrollo integral del ser humano con una atención prioritaria
hacia los pobres y los más necesitados. África se enfrenta cotidianamente a enormes
desafíos, y grandes franjas de la población de muchos países africanos padecen conflictos,
desde la insatisfacción social, a las guerras, desde las catástrofes naturales a las
calamidades por las sequías, inundaciones y ciclones. Las enfermedades, el SIDA incluido,
la malaria y otras patologías de las cuales se habla menos, están causando muchas
dificultades a las personas y a las familias.
En cada país, Caritas está presente
para enfrentarse a estos numerosos problemas y para llevar alivio a los miembros más
débiles de la sociedad. La función de Caritas, sin embargo, no es solamente la de
intervenir en situaciones de emergencia y ofrecer asistencia. Su papel va mucho más
allá. Está llamada a ser un aporte para el desarrollo integral de las personas. Esta
misión combinada de Caritas es a menudo mal interpretada, no obstante lo cual, ella
está bien desarrollada en el continente africano.
Una rápida mirada al trabajo
que las organizaciones de Caritas en África desarrolla entre bambalinas, muestra el
amplio espectro de actividades que se realizan en cada país africano. Potenciar las
comunidades, la educación y la formación para el desarrollo de las áreas rurales,
de la sanidad, de la gestión ambiental, de la capacidad de crear un desarrollo sostenible,
la formación de las habilidades personales para la gestión, la formación para gobernar
y el asesoramiento psico-social, son algunas de las actividades que numerosas organizaciones
de Caritas en África comparten. Ellas contribuyen plenamente y en el verdadero sentido
de la palabra a la reconciliación y a la promoción de la justicia social en los países
donde trabajan.
El trabajo de muchas organizaciones nacionales de Caritas en
África son sostenidas por diferentes “patrocinadores” de países desarrollados de otras
regiones del mundo. Esta eficaz colaboración es muy loable. Como confederación compartimos
valores y principios, respetamos al dignidad de los seres humanos, creemos en la solidaridad
y en el compartir, nos dedicamos al servicio y estamos convencidos de que la subsidariedad
es clave para la cooperación armónica entre colaboradores.