2009-10-08 15:26:06

UNA DELEGACIÓN DE PADRES SINODALES DE VISITA AL CAPITOLIO


Una delegación de la II Asamblea Especial para África del Sínodo de los Obispos para África, se ha dirigido esta mañana al Campidoglio para tener un encuentro con el Alcalde de Roma. Al centro de los coloquios, los temas de la cooperación para el desarrollo, las OGM, la regularización de los flujos migratorios, la acogida de los refugiados políticos y la contribución de Roma con vistas a la cumbre de la FAO sobre el desarrollo, en noviembre. Se habló también de la manifestación organizada por el Ayuntamiento de Roma precisamente sobre África, para el próximo 19 de octubre, sobre el tema África: ¿Qué asociación para la reconciliación, la justicia y la paz? El grupo de Padres Sinodales guiados por el Secretario General del Sínodo de los Obispos, S.E.R Mons. Nikola Eterovi_ que antes del encuentro, se recogió en oración el la Basílica de Santa María en Ara Coeli. El Secretario General del Sínodo de los Obispos comentó a los micrófonos de la Radio Vaticana: “Le somos gratos al Honorable Gianni Alemano por la invitación que ha hecho a la Presidencia de la Segunda Asamblea Especial del Sínodo de los Obispos para visitar sus oficinas e intercambiar recíprocos buenos deseos. La ciudad de Roma acoge cada año a millones de peregrinos, muchos de los cuales provienen de África y la ciudad de Roma hace todo lo posible para que ellos se sientan como en su propia casa. Esta es una vocación universal en Roma. Por otra parte los Obispos, representantes de 244 Padres Sinodales, todos africanos, han querido agradecerle al alcalde e intercambiar con él algunas opiniones sobre temas de gran importancia para ellos: la colaboración entre África y Europa, y cómo mejorarla, los refugiados políticos, la inmigración y también el posible y anhelado desarrollo de la producción agrícola en África”. El Alcalde de Roma ha comentado “Hemos hecho hincapié en que la ciudad de Roma sigue con gran atención el Sínodo para África, ya que de este Sínodo esperamos mensajes claros que relancen la cooperación y el desarrollo entre Europa y África. Todo ello con dos objetivos: el primero es el de hacer lo posible para que este Continente tenga un desarrollo equilibrado que le permita salir del subdesarrollo. El segundo tiene que ver con la posible regulación de los flujos migratorios de manera tal que, cualquier persona, pueda escoger si vivir en el propio país o emigrar a Europa, de acuerdo a los flujos regulares que deben ser apoyados como alternativa a la inmigración irregular”.








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