El viaje a la Rep.Checa, dará ánimo a una Iglesia vivaz y valiente testimoniando su fe

Jueves, 24 sep (RV).- Se están ultimando los preparativos para la inminente visita pastoral de Benedicto XVI a la República Checa. Este sábado 26 de septiembre, hasta el lunes 28, el Papa estará en este país que representa el centro de Europa, como él mismo evidenció en el Ángelus de este domingo, recordando que precisamente por este motivo se ha elegido como tema para este peregrinaje: “El amor de Cristo es nuestra fuerza”. Escuchar el programa



La importancia de este peregrinaje de Benedicto XVI la ponía en evidencia el padre Federico Lombardi con estas palabras: “Dentro de poco el Papa viajará de nuevo para realizar una visita breve pero intensa a la República Checa, del 26 al 28 de septiembre. Viajará al corazón de Europa, a un país de antigua tradición cultural al que el cristianismo ha dado una contribución esencial. Un país que recuerda en estos días, los veinte años del fin del régimen comunista y el renacimiento pacífico de la democracia, un país, donde la secularización está tan difundida que la práctica religiosa se reduce a una minoría”.



Como especifica el P. Lombardi, el viaje del Santo Padre se enmarca, en el aniversario de la caída del comunismo, bajo el cual, la Iglesia y los católicos fueron discriminados y perseguidos, de ahí que el episcopado checo haya elegido este tema, porque debido a los dramas sufridos en el siglo pasado, “la República Checa necesita –como todo el continente europeo- reencontrar las razones de la fe y de la esperanza”. “Siguiendo las huellas de mi predecesor Juan Pablo II, que visitó el país en tres ocasiones, también yo homenajearé a los heroicos testigos del Evangelio, antiguos y actuales, y animaré a todos a caminar hacia delante en la caridad y en la verdad”.



Precisamente sobre el mensaje del Papa en este viaje, el P. Lombardi respondía así: “Son muchos y fuertes los mensajes que el Santo Padre podrá dirigir a los creyente y a los hombres de buena voluntad en el país. Obviamente, significará un gran ánimo para una Iglesia vivaz y valiente en su testimonio de fe, que sepa difundir esperanza y caridad solidaria entorno a sí, y en particular para las generaciones jóvenes. Una invitación a un ecumenismo cordial, que de credibilidad y profundidad a la contribución de los creyente en la edificación del futuro en la sociedad secularizada. Una perspectiva de gran importancia cultural y moral, para que el proceso de unificación europea no se reduzca a los aspectos materiales y económicos, sino que lleve en sí, la riqueza de valores compartidos, necesarios para garantizar la dignidad de la persona humana. La fiesta de la nación checa, motivo por el cual se ha elegido esta fecha para el viaje del Papa, está dedicada al mártir san Venceslao. ¿Qué mejor manera para recordar de forma eficaz que el cristianismo ha dado y quiere seguir dando cordialmente un servicio precioso en lo más profundo del ser y de la esperaza de un pueblo, de todo pueblo?