Comentario sobre la Intención Misionera de septiembre dedicada a Laos, Camboya y Myanmar
Miércoles, 2 sep (RV).- Este mes de Septiembre, la Intención Misionera de Su Santidad
Benedicto XVI es: “para que los cristianos en Laos, Camboya y Myanmar que, con frecuencia,
encuentran grandes dificultades, no se desanimen de anunciar el Evangelio a sus hermanos,
confiando en la fuerza del Espíritu Santo”.
El comentario del Director General
del Apostolado de la Oración, padre Claudio Barriga Dominguez SJ. Escuchar comentario
Benedicto XVI,
en el discurso a la Conferencia Episcopal de Laos y Camboya en visita “ad limina”
en septiembre del 2007 decía a los prelados de estos países:
“Queridos hermanos,
ejercéis vuestro ministerio al servicio de la Iglesia en condiciones a menudo difíciles
y en situaciones muy diversas. Estad seguros de mi apoyo fraterno y del de la Iglesia
universal en vuestro servicio al pueblo de Dios. En efecto, ‘si debe decirse que un
obispo nunca está solo, puesto que está siempre unido al Padre por el Hijo en el Espíritu
Santo, se debe añadir también que nunca se encuentra solo porque está unido siempre
y continuamente a sus hermanos en el episcopado y a quien el Señor ha elegido como
Sucesor de Pedro’ (Pastores gregis, 8).
La comunión profunda que existe entre
vosotros, así como las colaboraciones que se expresan de diversas formas, cuando es
posible, son una ayuda valiosa en vuestra tarea pastoral, para el bien del pueblo
que se os ha confiado. Vuestra cercanía a los fieles, sobre todo a los más aislados,
es para ellos un aliento a perseverar de manera inquebrantable en la fe cristiana
y a crecer en el descubrimiento de la persona de Cristo, a pesar de las dificultades
de la vida diaria. La ayuda que recibís, en diversos campos, de Iglesias de evangelización
más antigua, principalmente por lo que concierne al personal apostólico o a la formación,
es también un signo elocuente de la solidaridad que los discípulos de Cristo deben
tener unos con otros. (…)
La fe cristiana no es una realidad extraña a vuestros
pueblos. ‘Jesús es la buena nueva para los hombres y mujeres de todos los tiempos
y lugares que buscan el sentido de su vida y la verdad de su misma humanidad’ (Ecclesia
in Asia, 14). Al anunciarlo a todos los pueblos, la Iglesia no busca imponerse, sino
testimoniar su estima por el hombre y por la sociedad en la que vive.
En el
contexto social y religioso de vuestra región, es particularmente importante que los
católicos manifiesten su identidad propia, respetando las otras tradiciones religiosas
y las culturas de los pueblos. Esta identidad debe expresarse sobre todo a través
de una experiencia espiritual auténtica, que tiene su fundamento en la acogida de
la palabra de Dios y en los sacramentos de la Iglesia.”