Lunes, 13 abr (RV).- En este lunes de Pascua, o lunes del Ángel, vamos a analizar
el significado de este día a través de las palabras del Siervo de Dios Juan Pablo
II, quien en 1994 explicaba el significado de esta denominación. El lunes del ángel.
“¿Por qué se le llama así?”, se preguntaba el Pontífice, poniendo en evidencia la
necesidad de destacar la figura de aquel ángel, que dijo desde lo más profundo del
sepulcro: “Ha resucitado”. “Estas palabras —Ha resucitado— eran muy difíciles de pronunciar,
de expresar, para una persona humana. También las mujeres que fueron al sepulcro lo
encontraron vacío, pero no pudieron decir: Ha resucitado, sólo afirmaron que el sepulcro
estaba vacío. El ángel dice más: no está aquí, ha resucitado”.
Juan Pablo II
puso de relieve que esto lo podía decir sólo un ángel, como fue también un ángel quien
dijo a María: “Concebirás un hijo, que será Hijo de Dios”, porque ninguna persona
humana podía pensar en un Dios-hombre, un Dios que se hace hombre. Debía ser un ángel,
enviado por el Padre, el que dijera esto a María. El Santo Padre Benedicto XVI también
recordó la importancia del significado de este mensaje a través del “alégrate” María.
“Ahora –señaló el Pontífice el pasado año- después del drama de la Pasión, resuena
una nueva invitación a la alegría: «Gaude et laetare, Virgo Maria, alleluia, quia
surrexit Dominus vere, alleluia», «Alégrate y regocíjate, Virgen María, aleluya, porque
verdaderamente el Señor ha resucitado, aleluya».