Encuentro Internacional «Libertad religiosa y reciprocidad»

Jueves, 26 mar (RV).- «Así como los musulmanes tienen derecho a rezar en mezquitas en los países de mayoría cristiana – y efectivamente tienen esta posibilidad – también los cristianos tienen derecho a contar con lugares de culto propios en los países de mayoría musulmana. Y ello en nombre del principio de solidaridad». Lo ha reiterado, una vez más, el presidente del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso, esta mañana en el encuentro internacional, titulado «Libertad religiosa y reciprocidad», organizado por la Pontificia Universidad de la Santa Cruz.

En su intervención - dedicada al «Concepto de reciprocidad en el Magisterio reciente» - el cardenal Jean Louis Tauran ha recordado que es un concepto presente, sobre todo, en el derecho internacional, en las relaciones entres los estados - de forma bilateral y multilateral. El purpurado ha señalado que «la reciprocidad ha adquirido, recientemente, la característica de regla jurídica en lo que se refiere a los derechos humanos y sus libertades fundamentales, en particular al derecho de libertad de pensamiento, de conciencia y de convicción».

Con una mirada retrospectiva al Magisterio reciente, es decir a lo que han escrito los últimos pontífices, el Concilio Vaticano II y algunas personalidades eclesiásticas, el cardenal Tauran ha recordado que la Iglesia católica propone el diálogo con la humanidad, fundado en el respeto recíproco y leal, como condición indispensable, con una atención especial a las relaciones con el Islam.

Recapitulando el magisterio del Papa Benedicto XVI, el presidente del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso ha destacado tres aspectos característicos: su «continuidad con las indicciones de sus predecesores. Mayor insistencia sobre la necesidad de la reciprocidad, en particular en lo que se refiere a las relaciones entre la Iglesia y el Islam. Y La correlación entre el tema de la reciprocidad y el de la comprensión mutua, incluyendo también cuestiones clave, como el problema de la libertad religiosa».

El cardenal Tauran terminó su intervención destacando la importancia de ese encuentro internacional para poner de relieve «el sentido auténtico que la Iglesia atribuye a la noción de reciprocidad en ámbito interreligioso, indicando normas claras que sancionen con precisión los ámbitos en los cuales se debe aplicar este principio, los límites insuperables que se deben salvaguardar en los países de tradición musulmana, y los caminos que se deben recorrer allí donde los católicos sufren injustificadas situaciones de dificultad».

Este encuentro Internacional sobre la libertad religiosa y la reciprocidad, se celebra hoy y mañana. Y en él participa también el prelado español, Mons. Francisco Gil Hellín, Arzobispo de Burgos, que ha sido entrevistado por nuestro compañero Rafael Álvarez. Mons. Gil Hellín nos habla de la importancia de esta cita y de su intervención dedicada a la Declaración del Concilio Vaticano II, Dignitatis Humanae, precisamente, sobre la libertad religiosa: