Ángelus: El Papa augura que en la Conferencia diplomática de Dublín sobre municiones
de racimo, se alcance un instrumento internacional fuerte que evite que los errores
del pasado se repitan
Domingo, 18 may (RV).- Hoy, durante el rezo mariano del Ángelus celebrado en la plaza
Matteotti de Génova ante miles de jóvenes, el Santo Padre Benedicto XVI ha recordado
la celebración de la Conferencia diplomática sobre municiones de racimo que mañana
dará inicio en Dublín, convocada con el fin de realizar una convención que prohíba
estas armas asesinas.
“Deseo que, gracias a la responsabilidad de todos los
participantes –ha señalado el Papa-, se pueda alcanzar un instrumento internacional
fuerte y creíble: de hecho, es necesario remediar los errores del pasado y evitar
que se repitan en el futuro. Acompaño con mi oración a las víctimas de las municiones
de racimo, y a sus familias, además de a quienes participarán en la conferencia formulando
mis mejores deseos de éxito”.
Durante el rezo mariano, el Santo Padre ha recordado,
entre efusivos aplausos de los jóvenes genoveses, la importante figura para la ciudad
del Papa Benedicto XV, -quien hizo colocar una reproducción de la Virgen de la Guardia
en los Jardines Vaticanos-, y del Siervo de Dios Juan Pablo II, quien precisamente
en su primer viaje apostólico a Génova realizó un homenaje a la Madre de Dios, del
mismo modo en que esta mañana lo ha hecho el Papa Benedicto XVI.
El Papa ha
finalizado su alocución previa al Ángelus recordando la certeza de la confianza en
María, y a ella ha confiado toda la ciudad de Génova, y toda la región de Liguria.
“Que María, Estrella de la esperanza –ha concluido el Pontífice- continúe guiando
el camino de todos los genoveses; especialmente el de las nuevas generaciones, para
que sigan, con su ayuda, la ruta justa en el mar tempestuoso de la vida”.