El Card. Saraiva Martíns señala que su dicasterio se une a las personas que anhelan
la beatificación de Papa Wojtyla
Miércoles, 26 mar (RV).- El próximo miércoles, 2 de abril -tercer aniversario de
la muerte del Siervo de Dios Juan Pablo II- Benedicto XVI presidirá la Santa Misa,
a las diez y media de la mañana en el atrio de la Basílica Vaticana. Recordamos que
el 28 de abril de 2005, el Papa concedió la dispensa, del tiempo de cinco años de
espera después de la muerte, para el comienzo de la Causa de beatificación y canonización
de Papa Wojtyla. Y, en abril de 2007, dos años después de la muerte de Juan Pablo
II, en la basílica de San Juan de Letrán, el Card. Camillo Ruini declaró cerrada la
primera fase diocesana de este proceso, entregando los resultados al dicasterio vaticano
correspondiente.
Nuestra emisora ha entrevistado al Card. José Saraiva Martíns,
prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, para saber cómo anda la
‘fase romana’ del proceso que se propone llevar al honor de los altares a Juan Pablo
II:
“Todos recordamos el día del funeral de Papa Wojtyla, recordamos aquel
“Santo subito!” Santo ya. Aquella expresión, aquel grito en la Plaza de San Pedro
expresaba bien, el modo de pensar de la gente: quería decir que Juan Pablo II gozaba
profundamente de una verdadera fama de santidad entre los fieles. Y bien sabemos que
ello es fundamental en un proceso de Beatificación. Si no existiera esta fama de santidad,
no se podría ni siquiera empezar una Causa de beatificación. Por lo que se refiere
al estado actual del proceso - la Beatificación de Juan Pablo II – cada proceso de
este tipo tiene dos fases fundamentales. Una diocesana – local – y otra que llamamos
‘romana’, a nivel de la Santa Sede. La fase diocesana se cerró el 2 abril del año
pasado. Una vez cerrada la fase diocesana se abrió enseguida, sin perder tiempo,
la fase romana con la entrega oficial de toda la documentación recogida en la fase
diocesana en mi dicasterio”.
Al Card. José Saraiva Martíns le preguntamos
también cuánto tiempo tendrá que pasar para poder decir Beato a Juan Pablo II:
“Una
vez recibida esta documentación, nos encargamos enseguida de la aprobación de un postulador
para la fase romana, que es el mismo postulador que había ejercido para la fase diocesana.
Nombramos también a un relator que, guiado por el postulador, debe elaborar la denominada
‘positio’. Es decir la recopilación de todos los documentos organizados de modo sistemático
y orgánico. Esta ‘positio’ se deberá imprimir y esta misma documentación tendrá que
ser estudiada por los órganos colegiales del dicasterio. En este momento, pues, es
el postulador de la Causa de beatificación de Juan Pablo II el que está elaborando
la ‘positio’. Es decir, el volumen o los volúmenes – no sé cuántos serán - que luego
serán entregados al dicasterio. En fin, que no depende del dicasterio, sino del tiempo
que necesitará el postulador para terminar su trabajo. Non sé cuántos meses, si un
año… Yo no lo sé y quizá él tampoco. Lo que puedo asegurar es que apenas recibiremos
la ‘positio’ la estudiaremos enseguida, sin perder tiempo. Porque ciertamente el dicasterio
desea que Juan Pablo II llegue cuanto antes a los altares y se le pueda llamar ‘Beato’.
Respondiendo así al grito de la plaza San Pedro: Santo subito! ¡Santo ya!”.