La Santa Sede apoya el uso responsable, justo y solidario de las biotecnologías vegetales
Sábado, 26 ene (RV).- Interviniendo en Roma ayer viernes durante la presentación del
informe “Nomisma” sobre la utilización del maíz OMG (organismos genéticamente modificados),
Mons. Giampaolo Crepaldi ilustró el punto de vista de la Santa Sede, sosteniendo el
uso responsable, justo y solidario de las biotecnologías vegetales. En la sede nacional
de la Confederación de los agricultores italianos, el secretario del Pontificio Consejo
Justicia y Paz reveló “que existe una asimetría en el debate cultural que protege
el maíz y no protege al hombre”.
“La Iglesia católica – explicó Mons. Crepaldi
– entra en el debate no porque esté interesada en las diversas tecnologías, sino porque
está atenta con la humanidad”. A este propósito, el prelado precisó que “la Santa
Sede quiere especialmente al hombre, que no es un producto, sino un proyecto” y que
“la sociedad, a todos los niveles, se salvará, si será capaz de rechazar cualquier
intento de reducción del ser humano”. “La sabiduría de la humanidad está en el discernimiento
ético de la utilización de las biotecnologías”.