Benedicto XVI se despide del personal de servicio, empleados y funcionarios de las
Villas Pontificias de Castelgandolfo, tras “una proficua y tranquila” estancia de
verano
Martes, 2 oct (RV).- Benedicto XVI, a la vigilia ya de su regreso al Vaticano, se
despedía ayer del personal de servicio, empleados y funcionarios de las Villas Pontificias
en Castelgandolfo, donde ha pasado el período de verano. En un breve encuentro, el
Pontífice agradeció a todos ellos el haber permitido que tuviera “una proficua y tranquila”
estancia. “Durante estos meses, una vez más, he podido comprobar la eficiencia y la
generosidad de vuestros servicios. Que el Señor, fuente de todo bien, os recompense
por el espíritu de sacrificio que realizáis cotidianamente” dijo el Papa.
“Con
generoso compromiso aportáis una significativa contribución al ministerio del Sucesor
de Pedro”, añadió el Santo Padre. “Una contribución a menudo escondida, pero siempre
útil. Continuad operando con espíritu de fe, para que vuestras actividades se conviertan
en testimonio de amor y de fidelidad a Cristo, que llama a todos sus discípulos a
seguirlo, realizando cada uno la propia específica vocación en la Iglesia y en el
mundo.