Pésame de Benedicto XVI por el trágico accidente de autobús en Francia que deja 27
muertos y 24 heridos entre un grupo de fieles polacos que peregrinaban por santuarios
marianos de Europa
Martes, 24 jul (RV).- Al conocer la noticia del trágico accidente ocurrido el pasado
domingo cerca de Grenoble, (Francia) en el que fallecieron 27 fieles polacos que habían
peregrinado a los santuarios marianos de Europa, Benedicto XVI ha transmitido su cercanía
espiritual y su pésame a Mons. Zugmunt Kaminski, arzobispo metropolitano de Szczecin,
asegurando sus oraciones por los fallecidos y participando en el luto de sus familiares
y de toda la comunidad diocesana.
Refiriéndose al accidente, en el que el
autobús en el que viajaban estos peregrinos calló en un barranco, el telegrama de
pésame - enviado en nombre del Papa por el Cardenal Secretario de Estado - señala
que «el viaje de estos fieles se interrumpió de forma dramática cuando volvían de
La Salette, por lo que para muchos de ellos ha sido el final de su peregrinación terrenal».
Tras señalar que «nos consuela la confianza en la Divina Misericordia, que
nos impulsa a creer que ellos han encontrado su meta en la gloria del Padre Eterno»,
el pésame de Benedicto XVI recuerda, como «fuente de consuelo y esperanza» las palabras
del apóstol san Pablo: «Creemos que Jesús murió y resucitó. Y de la misma manera,
Dios llevará consigo a quienes murieron en Jesús» (1 Ts 4,14).
«El Santo Padre
implora para todos los fallecidos el don de la vida eterna en el gozo de la unión
con Cristo» y desea a los heridos que se restablezcan pronto y completamente. E invocando
el don de la fortaleza y del consuelo para todos los familiares de las víctimas de
este trágico accidente, el Papa imparte de corazón su Bendición Apostólica. Sentimientos
a los que se une, también de todo corazón, el cardenal Tarcisio Bertone.