Día Internacional de la lucha contra el uso indebido y el tráfico ilícito de drogas
Lunes, 25 jun (RV).- En 1987, la Asamblea General de Naciones Unidas decidió establecer
el día 26 de junio de cada año como el Día Internacional de la lucha contra el uso
indebido y el tráfico ilícito de drogas, para dar una muestra de su determinación
en fortalecer las actividades necesarias para alcanzar el objetivo de una sociedad
internacional libre del abuso de drogas.
Precisamente el uso y abuso de drogas
sobre todo en los jóvenes, es un argumento que ha preocupado siempre a todos los Papas,
sobre todo a Juan Pablo II y Benedicto XVI, por la época en las que les tocó y les
ha tocado vivir. En este sentido, Benedicto XVI ha llamado siempre la atención de
todos los pastores, para que inculquen en los jóvenes valores positivos tales como
la solidaridad, la fraternidad, el compartir y el amor, porque sólo a través de la
defensa de estos ideales, los jóvenes se sentirán personas ‘llenas’, y no sentirán
la necesidad de recurrir a otros ‘remedios’.
Quizá este sea uno de los principales
problemas de la juventud de hoy, el no tener unos valores que les sirvan de cimiento
para su vida diaria. Como decía Juan Pablo II en su mensaje para la Jornada internacional
contra el abuso y el tráfico ilícito de drogas de hace más de diez años: “Esta jornada
–dijo en 1996- brinda una valiosa oportunidad para reflexionar sobre una de las más
trágicas situaciones que aún afectan a la sociedad actual, causando un daño incalculable,
especialmente a la generación más joven; es, también, una oportunidad para fortalecer
la decisión de afrontar este problema”.
La Santa Sede, recordó el Pontífice,
ha expresado su preocupación por el aumento del uso de drogas y del tráfico ilícito
de narcóticos y sustancias psicotrópicas, que la opinión pública parece aceptar a
veces con indiferencia generalizada y a menudo con la creencia errónea de que la protección
contra este flagelo consiste en marginar y abandonar a sus víctimas, sin afrontar
sus causas devastadoras.
Han pasado más de diez años de este mensaje y sigue
siendo de gran actualidad, por lo que la pregunta que nos podríamos hacer es, qué
se hace a nivel internacional para combatir la lacra del consumo de drogas. Las Naciones
Unidas para combatir este problema, el de la delincuencia y el del terrorismo en todo
el mundo, promueve una alianza mundial. La Oficina de la ONU para las Drogas, apoya
a la comunidad internacional en su lucha contra esas amenazas facilitando la elaboración
de normas sobre las cuestiones y ayudando a los Estados a ratificar y aplicar las
convenciones conexas.
Los jóvenes son los directamente afectados por el problema
de las drogas, ya que a ellos les llega de forma más directa, son más vulnerables
y a veces se dejan llevar por las modas. Pero no son todos los jóvenes los que se
comportan de este modo, en un carta enviada por los jóvenes “Para un siglo XXI sin
drogas”, éstos afirmaron su adhesión, en nombre de todos los niños y jóvenes del mundo,
a principios tales como la paz, la seguridad, el desarrollo, la información y la educación,
la precaución y ayuda mutua, la responsabilidad, la participación y la libertad a
negarse a las drogas. Este principio se basa en la consideración de que muchos jóvenes
se acercan a las drogas porque en su grupo hay quienes las consumen o se las proponen.
En este sentido, los jóvenes proclaman su derecho “a negarnos a consumir drogas y
a que los demás respeten nuestra opinión; a la valorización de una opción favorable
a nuestra salud para que podamos oponernos libremente a una oferta de drogas en nuestro
entorno”.
La misiva finaliza con un mensaje claro y directo: “Nosotros no hemos
hecho el siglo XX, hemos nacido en él; tenemos derecho a querer un siglo XXI libre
de las drogas, una sociedad libre de drogas y, además de pensar en ello, a actuar
para que así sea”. Con este llamamiento de los jóvenes que luchan por un mundo sin
drogas les dejamos para que mañana reflexionen en el Día Internacional de la lucha
contra el uso indebido y el tráfico ilícito de drogas.