Regresa a Roma la delegación de la Santa Sede tras su visita a Vietnam
Lunes, 12 mar (RV).- Llevando la bendición de Benedicto XVI, al final de una intensa
semana transcurrida en Vietnam, este lunes ha regresado a Roma la delegación de la
Santa Sede que ha realizado un viaje a este país, del 5 al 11 de marzo. La mencionada
delegación estaba integrada por Mons. Pietro Parolin, subsecretario para las Relaciones
con los Estados; Mons. Luís Mariano Montemayor, consejero de Nunciatura en la misma
Secretaría de Estado y Mons. Barnabé Nguen Van Phuong, jefe de oficina de la Congregación
para la Evangelización de los Pueblos.
En un Comunicado de la Secretaría de
Estado de la Santa Sede, hecho público al final de esta mañana, se lee que por parte
vietnamita se ha querido poner de relieve esta décimo cuarta visita de una delegación
vaticana, realizada a breve distancia de la audiencia de Benedicto XVI al primer ministro
Nguyen Tan Dung, el pasado mes de enero.
En primer lugar, la delegación de
la Santa Sede mantuvo un encuentro, con Mons. Paul Nguyen Van Hoa, obispo de Nha Trang,
presidente de la Conferencia Episcopal de Vietnam y con el consejo permanente de la
misma.
Luego, las sesiones de trabajo con el comité para los Asuntos Religiosos,
presidido por el sr. Nguyen The Doanh, se desarrollaron en un clima de cordialidad,
franqueza y respeto y permitieron pasar revista a la aplicación del ordenamiento sobre
las creencias y las religiones, del 18 de junio de 2004, que traza la política del
gobierno vietnamita en materia religiosa; algunos nombramientos episcopales en curso
así como otros temas concernientes a la vida y a la actividad de la Iglesia católica
en Vietnam».
La delegación gubernamental de Vietnam – prosigue el comunicado
- «no ha dejado de poner de relieve el papel que la comunidad católica desarrolla
en este país». Mientras que «la de la Santa Sede ha expresado el anhelo de que los
católicos cuenten cada vez más con la posibilidad de contribuir a la difusión de los
valores morales, sobre todo en lo que se refiere a la formación de la juventud, en
un momento de rápidos cambios socioeconómicos de la sociedad vietnamita y a la promoción
de la solidaridad para con las clases más débiles de la población. Ambas partes subrayaron
que los problemas aún abiertos podrán ser afrontados y debidamente resueltos con consenso
mutuo, a través de un diálogo paciente y constructivo».
Asimismo, la delegación
vaticana ha visitado al viceministro de Relaciones Exteriores, al vicepresidente de
la comisión para Asuntos Exteriores del Comité Central del Partido Comunista de Vietnam
y al presidente del Comité para Asuntos Exteriores de la Asamblea Nacional.
En
estas ocasiones se ha tratado sobre el tema de la normalización de las relaciones
con la Santa Sede. «La parte vietnamita ha asegurado que, siguiendo las instrucciones
del primer ministro, los órganos competentes ya están trabajando en este sentido,
al tiempo que se han examinado juntos algunas modalidades concretas para poner en
marcha el proceso de establecimiento de las relaciones diplomáticas».
Como
experiencia especialmente conmovedora, califica este mismo comunicado de la Secretaría
de Estado, la visita realizada a algunas diócesis de Vietnam. Es decir a las últimas
dos circunscripciones eclesiásticas que todavía no habían sido visitadas las de Quy
Nhon Kontum. La delegación vaticana concelebró la Santa Misa con los respectivos obispos
y gran parte del clero en un clima de profunda alegría y comunión eclesial.
Asimismo
la Delegación de la Santa Sede celebró la Eucaristía para los fieles en la catedral
de San José de Ha Noi y de la parroquia de Hon Gai, en Ha Long, en la diócesis de
Hai Pong, cerca de China. También visitó numerosas casas religiosas, obras de caridad,
internados y parvularios de la Iglesia católica, «una Iglesia que no deja de suscitar
admiración por su valentía, su vitalidad y su dinamismo».
La diócesis de Kontum,
en los altiplanos centrales, está integrada por fieles de etnias minoritarias, que
participaron «muy numerosos en los distintos encuentros de oración. En cada diócesis
visitada, la delegación de la Santa Sede pudo encontrar también a los presidentes
de los comités populares del lugar.
El comunicado de la Secretaría de Estado
termina asegurando que la delegación de la Santa Sede «ha llevado el aliento y la
bendición del Santo Padre Benedicto XVI, hacia cuya persona los fieles han manifestado
signos de profundo afecto, apego filial y fidelidad, con la esperanza de que el Papa
mismo pueda realizar un día una visita pastoral» a Vietnam.