Clausura V centenario fundación de los Museos Vaticanos: el Papa señala los museos como lugares para el diálogo entre culturas y religiones donde se pueda contribuir a la difusión de la cultura de la paz

Sábado, 16 dic (RV).- Benedicto XVI ha recibido esta mañana en audiencia en el Vaticano a una calificada representación de responsables de los mayores museos del mundo entero. Todos ellos reunidos en Roma en ocasión de un Congreso que ha clausurado el rico calendario de iniciativas conmemorativas organizadas en ocasión del V Centenario de los Museos Vaticanos. El congreso no sólo ha conmemorado los eventos del pasado, sino que ha sido una oportunidad para profundizar y cambiar opiniones en torno a la función educativa del museo en la sociedad contemporánea.

Y precisamente de este intercambio de experiencias, del estudio y de los objetivos de la “institución museo” en la sociedad actual, ha hablado en su discurso el Papa. Haciéndose eco del tema del simposio: “La identidad y el papel del museo hoy y sus futuras perspectivas”, el Pontífice ha dicho que “la Iglesia siempre sostiene y promueve el mundo del arte considerando su lenguaje un privilegiado vehículo de progreso humano y espiritual”.

“El desarrollo en el tiempo de los Museos Vaticanos -ha afirmado también el Papa- demuestra que esta finalidad ha estado siempre presente en el compromiso de los pontífices”. El Santo Padre ha observado que “la gran civilización clásica y la hebreo-cristiana no se oponen entre ellas, sino que convergen en un único plan de Dios. Se trata de una lógica propia dentro del Museo que forma una perspectiva verdaderamente unitaria en la compleja articulación de sus secciones.

Los museos Vaticanos pueden representar una extraordinaria oportunidad de evangelización porque, a través de las distintas obras expuestas, ofrecen a los visitantes un testimonio elocuente de la interrelación continua que existe entre lo divino y lo humano, en la vida y en la historia de los pueblos.

Benedicto XVI ha dicho que marcada por los cambios sociales, la nueva función de los museos hoy también ha variado sensiblemente: “de privilegio el Museo se ha convertido en derecho; de centro reservado a los artistas, especialistas, hombres de cultura, el museo es hoy casa de todos, respondiendo de esta manera a la difundida exigencia formativa de la sociedad”.

Las nuevas generaciones en los Museos pueden reconocer las raíces de su historia y de su cultura. Los museos pueden convertirse en lugares de mediación artística, ser anillos de conjunción entre pasado, presente y futuro, lugar de encuentro de hombre y mujeres de distintos continentes, centro operativo de investigación y taller de enriquecimiento cultural y espiritual. El Papa ha auspiciado que sea también lugar para el diálogo entre culturas y religiones donde se pueda contribuir a la difusión de la cultura de la paz.