Audiencia general: el Papa centra su catequesis en la figura de san Bartolomé y resalta la necesidad de tener una relación personal e íntima con Cristo

Miércoles, 4 oct (RV).- En su catequesis de la Audiencia General Benedicto XVI habla de la figura de san Bartolomé, uno de los Doce Apóstoles. “Testimonio de una profunda adhesión a Jesús, aún sin realizar obras extraordinarias”. “La fe nace de una experiencia viva con Jesús”.

El Papa, al final de la Audiencia en la plaza de san Pedro, ha recibido la ciudadanía de honor de Aschau am Inn, pequeña localidad de la diócesis de Munich y Frisinga, que Su Santidad visitó el mes pasado. Y antes de la audiencia, el Santo Padre ha bendecido una escultura de Santa Genoveva Torres Morales, Fundadora de la Congregación de las hermanas del Sagrado Corazón de Jesús y de los Santos Ángeles, ubicada en una hornacina exterior del ábside de la basílica de San Pedro.

Benedicto XVI ha proseguido hablando durante su catequesis de la Audiencia General de hoy sobre los apóstoles llamados por Jesús durante su vida terrena. Y hoy, ante más de 40 mil fieles llegados de todo el mundo, el Pontífice ha dedicado su atención a la figura del apóstol San Bartolomé. En las antiguas listas de los Doce, Bartolomé “viene siempre colocado antes de Mateo y después de Felipe o Tomás”. Su nombre es un patronímico porque hace explícita referencia al nombre de su padre. “De Bartolomé no tenemos noticias de relieve -ha explicado el Papa- su nombre es uno más en la listas de los discípulos de Jesús y no se encuentra por tanto en el centro de ninguna narración.

Tradicionalmente, sin embargo, viene identificado con Natanael que provenía de Canaa, y es posible que hubiera sido testigo del milagro realizado por Jesús en aquel lugar. La identificación en una sola persona de estos dos personajes es probable que estuviera motivada por el hecho de que el orden del nombre de Natanael en el evangelio de Juan está situado en el lugar que ocupa Bartolomé en los otros evangelios.

Felipe anuncia a Natanael que ha visto al Mesías; y éste responde que “Jesús no podía venir de un lugar como Nazaret”, como se pensaba entonces. En las expectativas judías de hecho -ha dicho el Santo Padre- el Mesías no podía provenir de una localidad tan poco importante como Nazaret. Pero al mismo tiempo ponía en evidencia, sin embargo, la libertad de Dios que sorprende nuestras esperanzas haciéndose presente donde no le esperamos. Por otra parte, comos sabemos, Jesús no era exclusivamente de Nazaret, pues había nacido en Belén.

Otra reflexión que nos sugiere la historia de Natanael, ha dicho Benedicto XVI, es que en nuestra relación con Jesús no nos debemos contentar solamente de sus palabras. Nuestro conocimiento tiene necesidad sobre todo de una experiencia viva con Jesús. El testimonio de los demás es importante. Pero somos nosotros mismos los que debemos estar implicados personalmente en una relación íntima y profunda con Jesús.

Felipe invita pues a Natanael a ir a ver a Jesús. Y cuando el maestro ve al apóstol acercarse le dice: “he aquí un israelita que no es falso” Un elogio que sorprende a Natanael y que suscita la conocida confesión de fe, límpida, del apóstol: “Rabí, tú eres el Hijo de Dios; tú eres el Rey de Israel”.

Unas palabras que ponen a luz un doble aspecto de la identidad de Jesús: su dimensión divina en cuanto Hijo de Dios Padre; y su dimensión humana e histórica como Rey de Israel, en cuanto Mesías esperado. No debemos perder de vista ninguna de las dos -ha dicho el señalado el Papa- porque si proclamamos en Jesús sólo la dimensión celestial hacemos de Él un ser demasiado etéreo y evanescente. Y si al contrario reconocemos solamente su concreta colocación en la historia acabamos por olvidar su dimensión divina.

No tenemos noticias precisas de la ulterior actividad apostólica de Bartolomé-Natanael. Según el historiador del siglo IV Eusebio, habría llegado hasta la India. En la tradición posterior a partir de la Edad Media, se impone la historia muy popular de su martirio, muriendo despellejado. Conocida es la imagen que recoge el Juicio Universal en la capilla Sixtina, donde Miguel Ángel pintó a san Bartolomé sosteniendo su propia piel sobre la cual el artista pintó su autorretrato.

Las reliquias del San Bartolomé son veneradas en Roma en la Iglesia de a él dedicada en la isla Tiberina, donde fueron traídas por el emperador Otón III en el año 983. Aún teniendo poca información sobre este apóstol su figura permanece ante nosotros -ha explicado Benedicto XVI- como testimonio de una profunda adhesión a Jesús, aún sin realizar obras extraordinarias.

Este ha sido el resumen que de su catequesis ha hecho el Santo Padre en español para los peregrinos de nuestra lengua presentes en la Plaza de san Pedro: 00:03:00:29

Queridos hermanos y hermanas:
En la catequesis de hoy nos fijamos en el apóstol Bartolomé, tradicionalmente identificado con Natanael. En el relato de su vocación, Felipe le anuncia que ha visto al Mesías; Natanael responde que no podía venir de un lugar como Nazaret, como se pensaba entonces. Con ello se resalta la libertad de Dios, que viene a nuestro encuentro precisamente allí donde los hombres no se lo imaginan. A continuación, Felipe invita a Natanael a conocer personalmente a Jesús: “¡Ven y verás!”, le dice. Nos enseña así que, en la vida cristiana es necesario que cada uno llegue a tener una relación personal e íntima con Cristo. Después, en su diálogo con Jesús, Natanael concluirá con una confesión de fe: “Rabí, tú eres el Hijo de Dios; tú eres el Rey de Israel”. Esta afirmación ilumina un doble aspecto de la identidad de Jesús: su dimensión divina en cuanto Hijo de Dios Padre, y su dimensión humana e histórica como Rey de Israel, en cuanto Mesías esperado. No tenemos noticias precisas de la ulterior actividad apostólica de Bartolomé-Natanael, pero su figura permanece ante nosotros como testimonio de una profunda adhesión a Jesús, aún sin realizar obras extraordinarias.

Saludo cordialmente a los visitantes de lengua española, en especial al grupo de la Junta de Castilla y León y a los diversos grupos parroquiales de España; saludo también a los peregrinos de México y de otros Países Latinoamericanos. Os animo, siguiendo al apóstol Bartolomé, a consagraros por entero a Cristo, especialmente en la sencillez de vuestra vida cotidiana. ¡Que Dios os bendiga!

Antes de concluir la Audiencia Benedicto XVI ha saludado a los participantes en el congreso de las Asociaciones Radio María y les ha animado a continuar en el esfuerzo de difundir, por medio del éter, el inagotable mensaje de la salvación de Cristo. Finalmente el Papa ha saludado a los jóvenes, a los enfermos y a los recién casados. Que el luminoso ejemplo de san Francisco de asís, del que hoy celebramos su festividad, solicite de vosotros, queridos jóvenes, a proyectar vuestro futuro con plena fidelidad al Evangelio. Que a vosotros, queridos enfermos, que os ayude a afrontar el sufrimiento con ánimo, encontrando en Cristo crucificado luz y consuelo. Y a vosotros, queridos recién casados, os conduzca hacia un amor cada vez más generoso.

Antes de la audiencia el Santo Padre ha bendecido una escultura de Santa Genoveva Torres Morales, Fundadora de la Congregación de las hermanas del Sagrado Corazón de Jesús y de los Santos Ángeles, conocida como, Angélicas, realizada por el artista italiano, Alessandro Romano. La estatua está colocada en una hornacina exterior del ábside de la basílica de San Pedro.

Tras la audiencia el Papa en una sala del Aula Pablo VI ha recibido a una delegación de Auchau am Inn (Archidiócesis de Munich y Frisinga), que le ha conferido la ciudadanía honoraria, siéndole entregada una placa y una medalla.