El Pontífice reitera ante la delegación del Patriarcado de Constantinopla la necesidad
de rezar para alcanzar la unidad y comunión plena de los cristianos
Jueves, 26 jun (RV).- Después del rezo del Ángelus, el Papa ha recibido en audiencia
a la Delegación del Patriarcado de Constantinopla. Una vez más, el Obispo de Roma
ha reiterado la necesidad de rezar para alcanzar la voluntad del Señor de la unidad
y comunión plena de los cristianos. «La fe común y el misterio de la salvación recibida
son el don que debemos transmitir a los hombres de nuestro tiempo», ha recordado
Benedicto XVI saludando con gran alegría y afecto a los miembros de esta Delegación
que Su Santidad Bartolomé I y el Santo Sínodo del Patriarcado Ecuménico de Constantinopla
han enviado con motivo de la solemnidad de los santos Pedro y Pablo, patronos de la
Iglesia de Roma.
Tras destacar su gratitud por la importante presencia de
esta Delegación, encabezada por el Metropolita de Pérgamo, Joannis Zizioulas - que
es también copresidente de la Comisión Mixta Internacional para el diálogo teológico
entre ortodoxos y católicos - el Obispo de Roma se ha referido a la peregrinación
apostólica que tiene previsto realizar a Turquía, del 28 al 30 de noviembre de este
año, con motivo de la fiesta de san Andrés apóstol, hermano de san Pedro.
«Respondiendo
a la invitación que me han formulado las autoridades del país, el Patriarcado y la
comunidad católica local, espero poder realizar una peregrinación apostólica a Turquía,
país de antigua y rica cultura – ha afirmado el Papa, señalando también que en este
noble país «vivieron muchos Santos Padres de nuestra tradición eclesial, teológica
y espiritual» y que esta invitación le permitirá participar en las celebraciones de
la Fiesta de san Andrés apóstol, hermano de San Pedro.
Evocando a sus predecesores,
los Siervos de Dios Pablo VI y Juan Pablo II, Benedicto XVI ha implorado la ayuda
del Señor para avanzar en el camino que nos lleve a celebrar juntos la Santa Eucaristía
con estas palabras: «Repitiendo el gesto de mis predecesores de venerada memoria,
Pablo VI y Juan Pablo II, en ocasión de sus visitas al Fanar, será una gran alegría
para mí encontrar a Su Santidad Bartolomé I, devolviéndole así las gratas visitas
que él ha tenido la bondad de cumplir aquí en Roma. Estoy seguro de que este recíproco
intercambio reforzará la fraternidad eclesial y facilitará la colaboración en nuestras
iniciativas comunes. Que el Señor nos ayude a avanzar con renovada confianza hacia
el día en el que podremos celebrar juntos la Santa Eucaristía del Señor, como signo
de comunión plena».
El Santo Padre se ha referido asimismo a otras importantes
ocasiones de encuentro y de diálogo fraterno, como la sesión plenaria de la Comisión
Mixta Internacional para el diálogo teológico entre ortodoxos y católicos que tendrá
lugar el próximo mes de septiembre, en Belgrado, gracias a la acogida ofrecida por
el Patriarcado ortodoxo serbio.
El Santo Padre ha puesto de relieve que «El
diálogo reanuda así su camino con una nueva etapa. Surge espontáneo el anhelo de rezar
para que el Espíritu Santo ilumine e impulse nuestros corazones, fortaleciendo la
común voluntad de responder, en lo que de nosotros depende, al ardiente ruego del
Señor: Ut unum sint, para que los discípulos de Cristo, unidos en la fe, anuncien
juntos su Evangelio al mundo entero con el fin de que, creyendo en El, todos queden
salvados».