60 aniversario de las persecuciones en Ucrania: el Papa recuerda que la Iglesia greco
católica tiene la misión de mantener visible la tradición oriental, testimoniar la
compatibilidad de las tradiciones y su profunda unidad en la diversidad
Jueves, 16 mar (RV).- El Papa señala la importancia y riqueza del patrimonio latino
y del oriental y la misión de la Iglesia greco católica en comunión plena con Pedro.
En su carta al cardenal Lubomyr Husar, en el 60 aniversario de las trágicas persecuciones
en Ucrania de cuantos permanecieron fieles al Obispo de Roma, el Santo Padre señala
la importancia y riqueza del patrimonio latino y del oriental, «con la multiplicidad
de manifestaciones históricas que Ucrania ha sabido expresar». El Papa pone de relieve
además que «la Iglesia greco católica en comunión plena con Pedro tiene la dúplice
misión de mantener visible en la Iglesia católica la tradición oriental y de favorecer
el encuentro de las tradiciones, testimoniando no sólo su compatibilidad, sino también
su profunda unidad en la diversidad».
Benedicto XVI dirige esta carta al cardenal
Lubomyr Husar, arzobispo Mayor de Kiev – Halyč, con motivo de la conmemoración del
60 aniversario de los tristes acontecimientos que marcaron la vida de la Iglesia greco
católica ucraniana. Cuando, a raíz del ‘pseudo sínodo de Lviv’ en marzo de 1946, un
grupo de eclesiásticos «se arrogó el derecho de representar a la Iglesia, atentando
gravemente contra la unidad eclesial y obligando a la Iglesia greco católica a volver
a las catacumbas».
En la misiva que fue enviada el 22 de febrero pasado, festividad
de la Cátedra de san Pedro Apóstol, y que se ha hecho pública este jueves, el Papa
evoca esos «tristes días» en que «se intensificaron las violencias en contra de cuantos
habían permanecido fieles a la unidad con el Obispo de Roma, provocando ulteriores
sufrimientos» y cómo «a pesar de indecibles pruebas y padecimientos, la Divina Providencia
no permitió que desapareciera una comunidad que, durante siglos, había sido considerada
legítima y viva identidad del pueblo ucraniano». Sino que «la Iglesia greco católica
perseveró en su testimonio de unidad, santidad, catolicidad y apostolicidad de la
Iglesia de Cristo».
«El recuerdo de lo que ocurrió hace sesenta años debe servir
como estímulo para la comunidad encomendada a los cuidados pastorales de la reorganizada
Jerarquía greco católica en Ucrania y para profundizar en sus íntimos y convencidos
lazos con el Sucesor de Pedro», escribe también Benedicto XVI, señalando luego que
«de aquella Iglesia, purificada por las persecuciones, han surgido ríos de agua viva
no sólo para los católicos ucranianos, sino también para toda la Iglesia católica
difundida en el mundo entero».