El Papa y la Familia Pontificia participan en la primera predicación de Adviento del
padre Raniero Cantalamessa, sobre “la fe en Cristo”
Viernes, 2 dic (RV).- “La fe en Cristo” ha sido el tema central de la primera meditación
de Adviento del padre Raniero Cantalamessa, esta mañana en la capilla Redemptoris
Mater del Vaticano ante la presencia de Benedicto XVI y la Familia Pontificia. El
religioso capuchino ha dado las gracias al Santo Padre por la confianza que ha depositado
en él al pedirle que continuase en el encargo de predicador de la Casa Pontificia:
encargo al que fue llamado por Juan Pablo II, en 1980.
El padre Cantalamessa
ha comenzado la meditación hablando del “papel que Jesús tiene en nuestra cultura”
y de “la presencia y ausencia de Cristo”: “Podemos decir que a un cierto nivel, Jesucristo
está muy presente, en los medios de comunicación, en general. Es como una Superestrella,
según el titulo de un conocido musical hecho sobre él”…. “pero si miramos en el ámbito
de la fe, del que forma parte Jesucristo en primer lugar, notamos en cambio una inquietante
ausencia, es más en algún caso notamos el rechazo de su persona”.
El padre
Cantalamessa se ha preguntado en qué creen en realidad los que se definen “creyentes”
en Europa o en otras partes. “Creen la mayoría de las veces en la existencia de un
Ser Supremo, de un Creador; creen que existe un más allá. Pero esta es una fe deísta,
no es una verdadera fe cristiana…Jesucristo, en la práctica, está ausente de este
tipo de religiosidad”.
Ante esta nueva situación -ha afirmado el religioso
capuchino- es necesario hacer un gran acto de fe, porque Jesús nos ha dicho “que ha
vencido al mundo”. El mundo en lo que tiene de resistente al evangelio. “Por lo tanto
no hay que tener ningún miedo o resignación”. “Hacen sonreír -ha señalado- las profecías
recurrentes sobre el inevitable final de la Iglesia y del cristianismo en la sociedad
tecnológica del futuro”. Nosotros tenemos una profecía mucho más autorizada a la que
atenernos: “el cielo y la tierra pasarán pero mis palabras no pasarán”.
Para
re-evangelizar el mundo post cristiano, el padre Cantalamessa ha dicho que es necesario
volver a partir de kerigma”, el anuncio incisivo de dos hechos: “Jesús ha muerto por
nuestros pecados” y “ha resucitado para nuestra justificación”. “Venir a la fe y abrir
los ojos a esta luz que es el Señor”
Pero el problema, según el franciscano,
“surge cuando la Iglesia aplasta con la doctrina el anuncio evangélico y por lo tanto
el milagro de la fe”.
“Preparémonos -ha dicho el padre Cantalamessa- a ser
antes que pastores, pescadores de hombres: muchas veces nos preocupa más saber cuántos
van a la Iglesia y no aquellos que se han alejado o viven al margen de ella”.