“El Papa no llevaría nunca a cabo una visita a Rusia que, en vez de contribuir a una
mayor comprensión y concordia, pudiese ser motivo de tensión o descontento”
Jueves, 27 oct (RV).- El Papa no llevaría nunca a cabo una visita a Rusia que en vez
de contribuir a una mayor comprensión y concordia, pudiese ser motivo de tensión o
descontento. Esta es la afirmación del secretario para las relaciones con los Estados
de la Santa Sede, Mons. Giovanni Lajolo, en una entrevista a un medio de comunicación
ruso con motivo de la visita que el prelado está realizando a Moscú.
El secretario
para las relaciones con los Estados de la Santa Sede, Mons. Giovanni Lajolo, se encuentra
desde ayer en visita oficial a Moscú donde permanecerá hasta el próximo domingo. Una
visita que pretende testimoniar la simpatía del mismo prelado y de la Santa Sede por
el pueblo ruso, probado por la enorme tragedia de Beslan y más recientemente por el
atentado de Nalcik.
En dos entrevistas concedidas por Mons. Lajolo a sendos
medios de comunicación rusos con motivo de su visita, el prelado ha expuesto las dificultades
existentes en la actualidad en las relaciones entre la Iglesia católica y la ortodoxa
rusa, Y ante una hipotética visita de Benedicto XVI a la Federación Rusa, Mons. Lajolo
la ha calificado como evento ecuménico muy significativo e importante que exigiría
una profunda preparación, porque según el prelado el Papa no llevaría nunca a cabo
una visita que en vez de contribuir a una mayor comprensión y concordia sobre todo
en campo cristiano, pudiese ser motivo de tensión o descontento.
En el plano
de las relaciones entre la Santa Sede y el gobierno ruso Mons. Giovanni Lajolo confirma
entre otras cosas, la comprensión y apertura del ejecutivo ruso con respecto a las
legítimas aspiraciones de la Iglesia Católica en Rusia.
En el plano religioso,
en la actualidad los católicos no tienen representantes en el Consejo Interreligioso
de Rusia y en la Cámara Pública en formación, donde por el contrario sí están representados
ortodoxos, musulmanes, judíos, budistas y protestantes. Interrogado en este sentido,
Mons. Lajolo quiso subrayar la disponibilidad de los católicos rusos para dar su contribución
específica en la promoción moral, espiritual y social de su propio país. “Por esta
razón espero que pronto pueda haber representantes católicos en la Cámara Pública
que puedan desarrollar plenamente su misión y colaborar en el crecimiento de la sociedad
rusa, de la que forman parte integrante”.
En el mismo sentido se manifestó
con respecto al Consejo Interreligioso de Rusia donde el prelado espera que los católicos
puedan colaborar pronto para desarrollar tanto el diálogo ecuménico entre los cristianos
como el interreligioso con los fieles de otras religiones y contribuir así a la serena
convivencia pacífica y civil de todos los ciudadanos del país.
En otra entrevista
Mons. Lajolo ha admitido las recíprocas dificultades que caracterizan las relaciones
entre la Iglesia Católica y la Iglesia Ortodoxa en Rusia. Unas dificultades que para
el prelado se centran en la “dolorosa incapacidad de elaborar un lenguaje común para
afrontar el examen y encontrar la solución de las divergencias”.
No obstante
el secretario para las relaciones con los Estado ha asegurado la disponibilidad tanto
de la Iglesia Católica en Rusia como de la representación pontificia en Moscú para
examinar junto a la Iglesia ortodoxa rusa, los motivos y las ocasiones de las diferencias,
y a veces los malentendidos, para intentar resolverlas. A pesar de todo ello, el prelado
recuerda durante la entrevista que “incluso en los momentos más difíciles, nunca se
ha interrumpido el canal de comunicación entre la Santa Sede y el Patriarcado de Moscú.
En
este sentido, Mons. Lajolo ha recurrido a las palabras de Juan Pablo II para reafirmar
que “trabajamos juntos, en el pleno respeto de nuestras distintas identidades y tradiciones”.
Para el prelado vaticano “hay mucho espacio para las iniciativas comunes en el campo
cultural para dar valor al patrimonio espiritual compartido por las dos iglesias”.