Superávit en los balances de la Santa Sede y la Ciudad del Vaticano
Sábado, 9 jul (RV).- Las finanzas vaticanas gozan de buena salud. El Consejo económico
de Cardenales presenta balances en activo tanto para la Santa Sede como para la Ciudad
del Vaticano. Un buen resultado respecto al año precedente que se había cerrado con
déficit.
Ayer se celebró en el Vaticano la 39 Reunión del Consejo de Cardenales para el Estudio
de los Problemas Organizativos y Económicos de la Santa Sede, presidida por el Secretario
de Estado, Cardenal Angelo Sodano. En la reunión participaron los cardenales Stafford,
Mahony, Ruini, Turcotte, Rouco, Dias, Humees, Egan y el patriarca Sabbah. También
estuvieron presentes los representantes de los Organismos competentes de la Santa
Sede: los cardenales Sebastiani, Nicora y Szoka; y los monseñores Croci y Celli.
Los puntos que se trataron fueron: el Balance Consultivo Consolidado para el año 2004
de la Santa Sede; el Balance Consultivo del Estado de la Ciudad del Vaticano y Óbolo
de San Pedro.
La reunión comenzó con la presentación por parte del Cardenal Sebastiáni del balance
Consultivo Consolidado de la Santa Sede de 2004, con unos ingresos de 205 millones
663 mil euros, con unos gastos de 202 millones 581 mil euros y con un haber de 3 millones
81 mil euros de superávit. Un resultado mejor que el del año 2003, que se cerró con
déficit.
Gran parte de los gastos son debidos al mantenimiento de los Dicasterios y los Organismos
de la Santa Sede, que ayudan, al Romano Pontífice en su servicio pastoral a la Iglesia
Universal y a las Iglesias particulares, promoviendo la misión propia de la Iglesia
en el mundo. A los Organismos centrales de la Santa Sede, que constituyen la Curia
Romana, se añaden las 118 Sedes de las Representaciones Pontificias en el extranjero
y las 9 Sedes ante los Organismos Internacionales. En la Curia trabajan 2 mil 663
personas, de las cuales 759 son eclesiásticos, 346 religiosos y 1.558 laicos; los
jubilados son mil 429.
El Cardenal Sebastiáni expuso después el Balance Consultivo 2004 del Estado de la
Ciudad del Vaticano, que gestiona el territorio vaticano y desarrolla acciones de
apoyo a la actividad de la Santa Sede. El ejercicio 2004 se ha cerrado con un resultado
positivo de cinco millones, 371 mil 194 euros.
Se ha realizado un esfuerzo financiero notable para la tutela, la valorización y la
restauración del patrimonio artístico de la Santa Sede, meta de visitas por parte
de peregrinos y turistas procedentes de todo el mundo, y para mantener también Radio
Vaticano, contribuyendo a la mitad de los gastos que genera la Emisora. Los empleados
del Estado de la Ciudad del Vaticano son mil 560. Los jubilados 878. Como siempre,
los balances de la Santa Sede y del estado de la Ciudad del Vaticano se verificaron
y se certificaron.
Durante la reunión también se habló de los medios de comunicación social y de manera
particular de Radio Vaticano. Medios, según se lee en el comunicado, que desarrollan
un importante servicio de información sobre la actividad y enseñanzas del Santo Padre
y de la Iglesia Universal, además de formación pastoral especialmente hacia los Países
con limitadas posibilidades para la evangelización, y que por lo tanto gastan ingentes
sumas financieras por la demanda continua de innovación tecnológica.
En cuanto al Óbolo de San Pedro, durante el pasado año llegaron donativos por un total
de 51 millones 710 mil 348 dólares, con una disminución del 7,5% respecto al año 2003.
El Santo Padre los ha destinado a obras de caridad para paliar los sufrimientos de
las poblaciones flageladas por catástrofes naturales; para sostener iniciativas a
favor de los huérfanos hijos de víctimas de conflictos armados o por el SIDA; para
hacer presente la ayuda de la Iglesia en zonas de particular tensión; y para el mantenimiento
de centros de formación cristiana en el mundo y otras actividades. El Óbolo de San
Pedro está constituido por las ofrendas destinadas a la asistencia del Papa en su
misión apostólica y caritativa: comprende la colecta realizada en las Iglesias particulares,
especialmente en la solemnidad de los Santos Pedro y Pablo, las aportaciones provenientes
de los Institutos de Vida Consagrada y de Fundaciones, así como donaciones particulares
de los fieles.
La contribución enviada por los obispos, según la posibilidad de cada diócesis, durante
el año pasado, ascendió a 27 millones 209 mil euros, con un aumento de más del 8%
respecto al ejercicio precedente. Estas entradas de la Sede Apostólica se establecen
por una norma de naturaleza eclesiástica, y hay que distinguirlas de aquellas que
se benefician, en base a acuerdos bilaterales o también por normas de algunos estados,
como el Kirchensteuer en Alemania, o el “ocho por mil” en Italia, que se destinan
no a la Santa Sede, sino a las Iglesias locales.
Durante la mañana de ayer, Su Santidad Benedicto XVI visitó brevemente al Consejo
de los Cardenales; se interesó por la temática en examen y subrayó la importancia
que los medios materiales tienen para el anuncio del Evangelio y para la Misión espiritual
de la Iglesia. Al final de la reunión, los cardenales Miembros del Consejo expresaron
profunda gratitud a todos aquellos que, con su aportación, han querido sostener la
misión de la Santa Sede en el mundo y dar, en unión con el Santo Padre, una respuesta
concreta a las necesidades de cuantos se encuentran en graves dificultades o en absoluta
indigencia.