2005-06-23 17:13:12

El Papa agradece la generosidad de la ROACO en favor de las iglesias orientales y Tierra Santa, de donde llegan señales esperanzadoras


Jueves, 23 jun (RV).- Benedicto XVI alienta a la Reunión de las Obras para la Ayuda a las Iglesias Orientales a seguir impulsando la reconciliación entre los cristianos de Ucrania y agradece la generosidad de la ROACO en favor de los hermanos en dificultad y en Tierra Santa, de donde llegan señales positivas.

Benedicto XVI ha alentado a los miembros de la Reunión de las Obras para la Ayuda a las Iglesias Orientales a proseguir en su misión de impulsar la reconciliación entre los cristianos de Ucrania y ha reiterado su profunda gratitud por la generosidad de la misma ROACO en favor de Tierra Santa y de los hermanos en dificultad.

Al recibir esta mañana a los participantes en la Asamblea anual de la ROACO, que se celebra en el Pontificio Consejo para la Unidad de los Cristianos y que finalizará mañana, el Papa ha agradecido, una vez más, el importante servicio que brindan estas Obras a la Iglesia Universal.

Con el anhelo de que prosigan en este «admirable compromiso, extendiendo cada vez más las perspectivas de su acción», el Santo Padre se ha referido a los temas que centran la Asamblea. Es decir, la situación de la Iglesia greco-católica en Ucrania; Jerusalén y Tierra Santa y la formación – tanto en Roma como en sus países de origen -de sacerdotes, religiosos y seminaristas, que pertenecen a las distintas Iglesias Orientales Católicas.

En particular, Benedicto XVI ha manifestado su alegría y esperanza ante el continuo desarrollo de la Iglesia greco-católica en Ucrania, después del «triste invierno del régimen comunista... puesto que la antigua y noble herencia espiritual», que custodia esta comunidad «constituye un verdadero tesoro para el progreso de todo el pueblo ucranio»: «Por lo tanto, os pido que sostengáis su camino eclesial, favoreciendo todo lo que impulsa la reconciliación y la fraternidad entre los cristianos de la amada Ucrania».

El Pontífice ha recordado «la caridad tangible» que enlaza a los cristianos de tradición latina y a los de tradición oriental, destacando la atención que los miembros de la ROACO dedican a «Jerusalén y Tierra Santa, hacia las cuales todos los cristianos tienen una deuda que no se puede olvidar». Destacando las señales positivas que llegan, Benedicto XVI ha invitado a rezar para que se logre la reconciliación: «Algunas señales positivas, que nos llegan en estos últimos meses, refuerzan la esperanza en que no tardará en llegar el día de la reconciliación entre las distintas comunidades que trabajan en Tierra Santa. Por ello no cesamos de rezar con confianza».

Tras poner de relieve que en el «tiempo presente - marcado a menudo por el individualismo - es más necesario que nunca que los cristianos ofrezcan el testimonio de una solidaridad que cruce cualquier frontera, para construir un mundo en el que todos se sientan acogidos y respetados», el Papa ha hecho hincapié en que «aquellos que cumplen esta misión, personal o comunitariamente, se vuelven propagadores de amor auténtico, amor que libera el corazón y lleva por doquier la alegría que nadie puede apagar, porque proviene del Señor».

En el contexto de la formación de los sacerdotes, seminaristas y religiosos, el Papa ha destacado también la importante presencia -cerca de la Sede de Pedro - de más de quinientos alumnos orientales de la Iglesias católicas, recordando la necesidad de seguir impulsando la ayuda material, la acción formativa, que profundice en la genuina tradición local y la auténtica actualización señalada por el Concilio Vaticano II.







All the contents on this site are copyrighted ©.