Benedicto XVI alienta a los obispos de Burundi a proseguir promocionando la paz y
la reconciliación en el país
Sábado, 28 may (RV).- Benedicto XVI ha alentado hoy a los obispos de Burundi a proseguir
la importante obra de la Iglesia católica en este país en favor de la promoción de
la paz y de la reconciliación. En su discurso a los miembros de la Conferencia Episcopal
burundesa, que han finalizado su quinquenal visita ad limina Apostolorum, el Santo
Padre ha expresado asimismo su satisfacción por la vitalidad espiritual y misionera
de estas comunidades diocesanas, dirigiendo un cordial saludo a todo el pueblo de
Burundi.
Con el anhelo de que esta peregrinación a Roma, para mantener encuentros con el Sucesor
de Pedro y sus colaboradores, aliente a los obispos burundeses en su “misión de servidores
del Evangelio de Cristo, para la esperanza del mundo”, Benedicto XVI ha evocado la
figura del Nuncio Apostólico Arzobispo Michael Aidan Courtney - asesinado a finales
de 2003 mientras regresaba a Bujumbura de una misa – y que desempeñó con generosidad
y fidelidad su misión en favor del atormentado pueblo de Burundi, hasta el sacrificio
supremo de su vida.
Ante los desafíos del momento actual en este país africano, que conoció la crueldad
de una guerra civil que en diez años dejó más de trescientos mil muertos y un millón
de prófugos - sobre una población de menos de siete millones de personas - el Papa
ha evocado el testimonio heroico de la fe que brindaron numerosos cristianos. Testimonio
que debe seguir impulsando “el anhelo de trabajar en la fraternidad y en la unidad
de todos, en el seguimiento de Cristo y en su nombre”, apagando los ánimos de venganza
y conduciendo al perdón y a la reconciliación: “Deseo que el plan de acción pastoral
que habéis elaborado, así como los sínodos diocesanos que lo pondrán en obra localmente,
contribuyan a anunciar el Evangelio, a sanar las memorias y los corazones, a favorecer
la solidaridad entre todos los burundeses, apagando los ánimos de venganza y rencor
e invitando sin cesar al perdón y a la reconciliación”.
Refiriéndose a la Exhortación Apostólica posinodal Ecclesia in África, promulgada
hace diez años por Juan Pablo II, Benedicto XVI ha exhortado luego a los obispos de
Burundi a proseguir en sus esfuerzos para impulsar la inculturación del mensaje evangélico,
permaneciendo fieles a todos los valores africanos auténticos, por medio de una sólida
formación cristiana, poniendo en guardia contra las sectas.
Al finalizar su encuentro con los prelados burundeses, el Pontífice ha manifestado
su gratitud a los sacerdotes, religiosos, religiosas y catequistas, de este mismo
país o de otras naciones, que desarrollan su apostolado en Burundi – “a menudo en
situaciones difíciles” – impulsando las obras de la Iglesia en los sectores de la
promoción social, de la educación y de la sanidad.