El Papa exhorta a los futuros diplomáticos de la Santa Sede a ser sacerdotes ejemplares
y no dejarse nunca tentar por la lógica de la carrera y el poder
Viernes, 20 may (RV).- Benedicto XVI ha recibido esta mañana a los miembros de la
Pontificia Academia Eclesiástica a quienes ha exhortado a ser “sacerdotes ejemplares,
animados por la oración constante e intensa, cultivar la intimidad con Cristo... y
no dejarse nunca tentar por la lógica de la carrera y el poder”.
La Pontificia Academia Eclesiástica es una institución donde se forman los sacerdotes
que se preparan a formar parte del servicio diplomático de la Santa Sede, en las Nunciaturas
Apostólicas o en la Secretaría de Estado.
El Santo Padre ha subrayado que los miembros de esta Academia “tendrán que preocuparse
de hacer presente y visible la solicitud del Sucesor de Pedro por todos los componentes
del rebaño del Señor, especialmente por los indefensos, los débiles y los abandonados”.
En otro momento de su discurso, el Papa ha recordado la sorpresa general que ha provocado
el que “el testimonio de Juan Pablo II haya tenido tanto eco incluso en poblaciones
no cristianas, como han relatado distintos Nuncios Apostólicos en sus informes”. “Esto
confirma – ha subrayado Benedicto XVI- que allá donde Cristo es anunciado con coherencia
de vida, habla al corazón de todos, incluso a los hermanos de otras tradiciones religiosas”.
En cuanto a los requisitos de los miembros de la Academia Pontificia y para desarrollar
de forma adecuada el servicio que deberán prestar el Papa ha enumerado una sólida
preparación cultural, incluido el conocimiento de las lenguas, la historia y el derecho,
y una sólida apertura a las distintas culturas. Pero aún más importante, como ha recordado
el Pontífice, es la finalidad fundamental de vivir la santidad y la salvación de las
almas que encontrarán en sus caminos.