El Colegio Cardenalicio recibió el pésame del Cuerpo Diplomático
Miércoles, 13 abr (RV).- Esta mañana, con la participación de 140 Cardenales, ha tenido
lugar la novena Congregación General. Después de invocar el Espíritu Santo y rezar
el “Adsumus”, los Cardenales se han detenido en algunos artículos del cuarto capítulo
de la Constitución Apostólica “Universi Dominici Gregis”. Asimismo, la Asamblea ha
continuado con el intercambio de ideas sobre la situación de la Iglesia y el mundo.
Al final se les ha entregado a los purpurados la serie de sellos Sede Vacante que
la Oficina Filatélica del Estado de la Ciudad del Vaticano ha emitido. Como cada día,
la reunión ha finalizado con el canto del Regina Coeli.
A las 10 de la mañana,
en el atrio del Aula Pablo VI del Vaticano, el Cardenal Joseph Ratzinger, ha recibido
el pésame al Colegio Cardenalicio por parte del Cuerpo Diplomático acreditado ante
la Santa Sede, por la muerte de Juan Pablo II. Como Decano del Colegio de Cardenales,
el Cardenal Ratzinger ha agradecido vivamente este extremo saludo de los representantes
de las Naciones con las que la Santa Sede ha estrechado las relaciones en estos años
de Pontificado.
“Juan Pablo II ha guiado la Iglesia durante más 26 años –ha
señalado el Purpurado alemán-, mostrando que ella es a la vez, como recuerda el Concilio
Vaticano II, el signo y el instrumento de la unión íntima con Dios y de la unidad
de todo el género humano; ha hecho entrar a la Iglesia en la esperanza con un impulso
renovado; y la ha introducido en el tercer milenio, invitando a los cristianos a llevar
a Cristo al mundo y llamando a todos los hombres de buena voluntad a un despertar
de bondad, de paz y de solidaridad”.
En su discurso al Cuerpo Diplomático,
el Decano de los Cardenales también ha dicho que Juan Pablo II ha sido “un Papa que
se ha comprometido hasta el final de sus fuerzas para anunciar el Evangelio en todos
los continentes”, sobre todo a través de sus innumerables viajes. A nuestra tristeza
por su pérdida “damos las gracias a Dios por habernos dado este gran pastor”.
“Vuestra
numerosa presencia esta mañana –ha terminado diciendo el Purpurado- testimonia la
acción internacional promovida por nuestro amado Santo Padre Juan Pablo II, que a
lo largo de su pontificado ha exhortado siempre a todos los países a encontrar soluciones
pacíficas y a perseguir el diálogo y la concordia, invitando a los dirigentes políticos
a atender las peticiones concretas de todos los pueblos, sobre todo de los más pequeños,
indefensos y pobres. Un compromiso en favor de la vida, de la persona humana y al
servicio de la paz y la solidaridad”.