La Santa Sede espera explicaciones del gobierno argentino por la destitución del Ordinario
Militar
Sábado, 19 de marzo.- Impedir que un obispo, legítimamente nombrado por la Santa Sede,
ejerza su ministerio pastoral es una violación de la libertad religiosa y de los acuerdos
vigentes. De esta forma respondía el director de la oficina de prensa de la Santa
Sede, Joaquín Navarro Valls, a los periodistas que le han preguntado esta mañana por
las disposiciones adoptadas por el presidente de Argentina con respecto al Ordinario
Militar, Mons. Antonio Juan Baseotto.
Navarro Valls, que ha subrayado que no suele hacer comentarios sobre las noticias
de la prensa, ha confirmado que se está esperando una comunicación oficial del gobierno
argentino al Santo Padre, que es quien ha nombrado ordinario militar para Argentina
a Mons. Baseotto. Un nombramiento efectuado según las normas del derecho canónico
y de los acuerdos vigentes entre ambos estados.